“¡¿POR QUÉ DECIDÍ CORTARME EL PELO, POR QUÉ?!”
El cabello es algo sumamente importante, dice mucho de nosotros mismos, de cómo hemos decidido enfrentarnos al mundo y cual es nuestra postura para sobrevivir en esta sociedad cada vez más competitiva y enferma. Y quien intente decir lo contrario, está loco, porque incluso si no hacemos nada para cuidar nuestro cabello, refleja algo de nosotros.
Y no es fácil decidir hacerle cambios muy radicales, hay personas para quienes es una decisión muy sencilla y pasan constantemente probando cosas nuevas, pero no todos tenemos ese talento para afrontar con tanta madurez la posibilidad de que el corte nos quede horrible y nos veamos feos por meses.
Por eso cuando decidimos cortarlo, todos pasamos por una serie de estados que son imposibles de evitar y que se convierten en un círculo vicioso porque cuando lleguen al último punto, vuelvan al primero: la historia se repite una y otra vez.
1. Valentía
Ese hermoso momento cuando decides que ya fue suficiente tiempo con el mismo corte de cabello y que necesitas un nuevo look, nada te puede sacar la idea de la cabeza y estás completamente segura que es la mejor idea que haz tenido en meses.
2. El entusiasmo
Se lo comunicas a quien quiera escucharte porque en verdad estás demasiado emocionada por tu decisión y necesitas compartir con el mundo ese entusiasmo por un corte nuevo.
3. Hasta que atacan las dudas
Porque obvio te miras al espejo en el día que planeabas ir a cortarlo y está tan hermoso, con una caída tan armoniosa y empiezas a preguntarte “¿Por qué es que yo quería deshacerme de esta preciosura?”.
4. Pánico
Y como eres una mujer de palabra, lo haces, te sientas en esa silla y te cortan el pelo. Y es peor que cualquier película de terror, ver a través del espejo como esa mujer desalmada que se hace llamar peluquera mutila tu cabello es una sensación terrible.
5. No pensé que sería así, pero me gusta, me gusta, me gusta
Como un mantra te lo repites por siempre: Me gusta como que quedó, de verdad, me encanta, me fascina, y de todos modos el pelo crece. Rápido, pelo, crece, crece, CRECE.
6. Enamoramiento
Lo amas, con tu vida, nunca te has sentido mejor, tú sabías que era la mejor idea que has tenido en meses, como pudiste dudar en algún momento de esto si te vez tan fabulosamente hermosa.
7. No eres tú, soy yo
No es que el corte sea malo, es que no le viene a mi cara, es que no es para mi. ¿Qué demonios estaba pensando? ¿Qué clase de animal soy que no puedo evitar sucumbir a mis impulsos? Juro que nunca, nunca más me corto el pelo.