Datos para agradecer toda la vida.
La leche, además de ser muy rica, es muy saludable. Nos aporta muchos nutrientes y pocas calorías, así como también energía para funcionar bien durante el día. Y como si eso fuera poco, tiene muchísimas funciones en nuestra cocina; no sólo es un ingrediente crucial para muchos de nuestros platos, sino que es capaz de “arreglar” cualquiera de estos en diversos casos; muy seco, muy salado, muy oloroso, etc. Así que ya sabes, la próxima vez que estés en problemas culinarios, solicita ayuda del mejor de los superhéroes: la leche.
1. Calamares más suaves
Para que los calamares queden más blandos, debes sumergirlos en leche unas 3 horas antes de prepararlos.
2. La mejor manera de conservar las yemas de huevo
En un bowl con leche se conservarán perfectamente. Sino, puedes hacerlo en uno con aceite.
3. Desalar guisos
Si se te pasó la mano con la sal en tu guiso de pollo o carne, añade media taza de leche fría y remueve.
4. Toque dorado perfecto para los pasteles
Para dorar un poco más tus pasteles úntalos con un poco de leche con la ayuda de un pincel.
5. Menos olor a pescado al freír
El pescado suele tener un olor no muy agradable cuando se fríe. Para evitar eso debes pasarlo por leche con agua antes de cocinarlo (también puedes ponerle limón). Lo bueno es que no sólo reducirá su mal olor, sino que también aumentará su sabor.
6. Revivir el queso
Si el queso que guardaste perdió su gracia, sumérgelo en leche tibia por un rato. ¡Volverá a la vida!
7. Albóndigas jugosas
Si quieres un poco más de líquido en tus albóndigas y te sobra un poco de pan, remoja las migas en leche durante 5 minutos. Escúrrelas y añádelas a la carne picada.
8. Evitar pastas resecas
Si se te pasó un poco la mano con el tiempo y se te resecaron las pastas, un poco de leche es la mejor solución. Y para cuando quieras recalentarlas al otro día, lo mismo.
9. Ahumados menos salados
Para sacar un poco “la sal” a los ahumados, la mejor receta es remojarlos en un bowl con leche durante 5 minutos. Así de fácil.
10. Puré de patatas más suave
Para hacer que el puré de patatas quede más cremoso debes añadirle un poco de leche.
11. Tortillas esponjosas
Añade un poco de leche a los huevos batidos o remoja un poco de miga de pan en leche, escúrrela y agrégala al huevo batido.
12. Calabacín “libre” de aceite
Para que al freír el calabacín este quede menos aceitoso, lo mejor es remojarlo durante dos horas en leche con un toque de ajo.
13. Jamón perfecto
Para desalarlo o para que quede menos reseco o duro sumérgelo en un bowl con leche.
14. Cebolla menos fuerte
Para reducir ese intenso sabor de la cebolla y suavizarla, sumérgela en leche por unos minutos.
15. Pescado descongelado como nuevo
Para hacer que el pescado tenga un sabor más fresco, ponlo en un plato con leche durante una hora antes de cocinar.
16. Rellenos más jugosos
Remoja migas de pan en leche y añádelas al relleno, notarás la diferencia.
17. Refrigerador libre de olores
Pon en su interior un recipiente con leche y una rodaja de limón. Notarás el cambio.