Fue una avalancha de sorpresas.
Nicholas Bryant se presentó como un participante común y corriente sobre el escenario del concurso de televisión Britain’s Got Talent. Además de un piano no había más elementos que les dieran pistas a Simon Cowell y los otros miembros del jurado sobre lo que estaba a punto de ocurrir. ‘Nich’ habló con torpeza y timidez, así que las expectativas con respecto a su presentación eran bastante bajas. Sin embargo, en cuestión de segundos todos quedaron con la boca abierta.
httpv://youtu.be/AWN9XY9CDIo