Amy Jandrisevits fabrica muñecos que ayudan a niños a no avergonzarse de ser distintos al resto. Pequeños con discapacidades y raras condiciones por fin son representados.
Gracias a los estereotipos que se han implantado en la industria de los juguetes, como las populares y esbeltas muñecas rubias y musculosos héroes de acción, por ejemplo, muchos niños se han visto afectados por esas imágenes poco realistas, sobre todo quienes sufren de discapacidades o enfermedades que no son comunes.
Para ellos es muy difícil encontrar juguetes con los que se sientan representado, lo que genera que desde temprana edad comiencen a sentirse discriminados.
Al notar este problema, una mujer de Wisconsin, en Estados Unidos, llamada Amy Jandrisevits se propuso crear ella misma muñecos que pudieran ayudar a miles de niños.
Fue así como creó la “A doll like me” o “una muñeca como yo” en español, donde crea figuras de felpa que son idénticos a sus futuros dueños, “es mi sincera convicción que las muñecas deben parecerse a sus dueños y las muñecas deben estar disponibles en todos los colores, géneros y tipos de cuerpo”, dijo Amy a medios locales.
Ha creado muñecos con diversos colores de piel, con lunares, anteojos, con albinismo, prótesis, marcas de nacimiento y todo tipo de malformaciones. Su meta es lograr que los pequeños se sientan incluidos y aceptados gracias a este proyecto que realmente la llena de pasión.