Ya son más de 700 los nuevos ciudadanos franceces, recompensados por su enorme trabajo contra el COVID-19. ¡Lo merecen!
Quienes trabajan en los hospitales, en el área de salud y directamente con el coronavirus, han realizado una labor impecable. Diariamente se exponen a los contagios, con largos turnos de trabajo y muchos sin ver a sus familias. Es un laburo muy sacrificado. En varios lugares del mundo les han rendido homenaje, desde esculturas hasta condonaciones de deudas.
En esta oportunidad, Francia ha entregado una tremenda noticia para sus área de salud. Ha premiado con la ciudadanía a sus trabajadores inmigrantes de la “primera línea”. Es un reconocimiento a su tremendo esfuerzo. ¡Muy merecido!
La decisión fue materializada por el Ministerio del Interior, que invitó a todos los residentes de la primera línea a solicitar su naturalización acelerada, según expresa el medio BBC UK.
Desde entonces han sido cientos los inmigrantes del área de salud que han recibido su ciudadanía. Y es que no solamente se trata de médicos o especialistas, pues también pueden acceder a ella quienes se desempeñan limpiando o colaborando de otras maneras.
El panorama ha sido bastante complejo para Francia, respecto del coronavirus, ya que hasta este miércoles sumaba casi 2,5 millones de casos confirmados y más de 60 mil fallecidos.
El trabajo de los profesionales de salud ha sido primordial.
“Los trabajadores de la salud, los profesionales de la limpieza, los trabajadores de la guardería y los dependientes de las tiendas …
Han demostrado su compromiso con la nación. Ahora le toca a la República dar un paso hacia ellos”.
–expresó la Ministra Marlene Schiappa–
La iniciativa inició en septiembre de este año, recibiendo muchísimas solicitudes y, hasta el momento, entregándose unas 700, de las poco menos de 3 mil solicitudes.
Según explican las autoridades, para solicitar este beneficio, normalmente se debe residir hace 5 años en el país, con ingresos estables y una integración demostrada a la sociedad.