Seguramente sueles investigar todo lo relacionado con los gatos porque quieres que tu mascota esté sana y feliz. Es por esto que queremos ayudarte y te contamos la verdad: aquí 7 mitos y realidades relacionados con estos felinos:
1. “Es mejor que no los bañes”
No. Lo cierto es que los gatos son excesivamente limpios, pero de todas formas sí los puedes bañar, pero como máximo dos veces al mes y cuidando que no se expongan al frío. Esta recomendación se debe a que usualmente les toma una semana en recuperar la grasa natural de su pelo, que convierten en vitamina D.
2. “Son independientes”
Sí, les gusta tener su espacio, pero necesitan de su dueño para cubrir todas sus necesidades vitales. Pero aún así tienes que tener cuidado porque si no les das afecto ni juegas con ellos, pueden deprimirse.
3. “Los gatos siempre caen parados”
Falso. Los gatos tienen un instinto que hace que cuando estén cayendo puedan voltearse y hacer movimientos rápidos. Pero también pueden fallar y fracturarse, por lo que no es un riesgo que debas correr.
4. “Provocan enfermedades respiratorias”
No. Los gatos no provocan asma ni enfermedades respiratorias, aunque obviamente, su pelo podría generarte alergia si tienes predisposición.
5. “Tienen toxoplasmosis”
La toxoplasmosis es una enfermedad que resulta de una infección provocada por el parásito Toxoplasma gondii que vive en algunos seres humanos, animales y gatos. Pero tener un gato no incrementa el riesgo de contagio. Los gatos son los únicos que eliminan el parásito por materia fecal (lo hacen una vez en su vida).
6. “Y no pueden estar cerca de una mujer embarazada”
La Toxoplasmosis es dañina para los fetos, pero ésta no surge de manera espontánea; hay que estar en contacto con el parásito para contraerla. El peligro está presente si te expones a las heces de los gatos, comes carne cruda o verduras, huevos o leche que no ha sido pasteurizada.
7. “Deben tomar leche”
No necesariamente. A muchos les gusta, pero hay gatos que no la toleran y les provoca diarrea. Estando bien alimentados no la necesitan para obtener nutrientes.