Todos conocemos esa famosa frase que dice: “No dejes para mañana lo que puedes hacer hoy”. Suena hermosa, pero vaya que es difícil llevarla a cabo, porque a veces nos vence la pereza. Pero si tenemos esa mentalidad, ¿qué tal si hoy mismo le damos un giro y nos proponemos a dar un impulso renovador en nuestras vidas?
La vida está ocurriendo ahí afuera y, de hecho, hay cosas que muchos dejamos para mañana pero que están frente a nuestros ojos para desafiarnos y cambiarnos. Hoy mismo, tenemos por lo menos 5 desafíos que nos esperan. ¿Estás listo (a)?
1. Aprender inglés de una vez por todas.
Estamos rodeados de contenido en el idioma más famoso del mundo: series geniales, canciones pegajosas e increíbles, películas notables… Un mundo está a nuestro alcance para tomar confianza, sumergirnos en el idioma y, aunque sea de a poco, finalmente aprenderlo. ¡Tú puedes!
2. ¡Ejercicio!
No importa si eres de estatura alta o baja, si tienes sobrepeso o no. Mover el cuerpo no es un remedio sólo para el cuerpo: también lo es para tu ánimo. Ejercitarte sirve para tu salud, tu tranquilidad y lo más emocionante de todo: ¡te permite probar que puedes llegar muy, muy lejos!
3. Adiós, vicio.
¿No fumas? Bueno, no importa. Lo más probable es que, aunque no tengas un vicio así, tengas alguno más pequeño. Por ejemplo, morderse las uñas (un clásico). Rétate con el desafío de dejarlo: verás cómo, nuevamente, desarrollarás un potencial que quizás no sabías que tenías.
4. Invertir tus ahorros.
Este punto puede parecer dirigido a millonarios o algo así, pero no necesariamente. Aunque tengas sólo un poquito, aun así puedes invertir. Incluso aportar para la caridad puede ser una inversión emocional en los demás. Desafíate a exponerte a riesgos invirtiendo, si tienes un buen dinerito, y/o a colocar tu dinero para quienes lo necesitan más que tú. Tu vida puede cambiar… y la de otros también. ¡No tengas miedo!
5. El sueño de estudiar.
¿Tienes el sueño de ingresar a una carrera de enseñanza superior, en una institución prestigiosa, pero dejas la decisión para después, con la excusa de que “necesitas más tiempo para decidir”? A veces, no necesitas tanto tiempo. Y si eres un alumno de excelencia, ¡el sueño es para hoy!