Tres ingredientes y listo.
Cuando queremos que nuestra casa huela bien, compramos los típicos ambientadores de supermercado. Funcionan relativamente bien, pero no duran mucho y es un poco tedioso tener que depender de los repuestos que necesitamos cuando se acaban (que son bastante caros). Además, a veces se agota justo ese olor que tanto nos gustaba. Pero por fortuna hay una solución sencilla y económica que te ahorrará ese problema. Puedes hacerlo en casa y realmente será muy útil para eliminar los malos olores.
Necesitas:
- Aceite esencial con algún aroma agradable
- Cuatro cucharadas de bicarbonato de sodio
- Tres tazas de agua hirviendo
- Un frasco con spray
1. En el bowl, mezcla el aceite con el bicarbonato
2. Echa la mezcla en la botella con la ayuda de un embudo
3. Ahora, pon el agua en la botella. Ciérrala y revuelve
4. ¡Y listo!
Puedes ponerle un lindo papel para que tu ambientador no se vea tan “industrial”.
Fácil y muy natural.