También le dijeron que se creía “Jesucristo”.
No soy fan de Justin Bieber. Me gustaron algunas canciones de su último disco, que tenemos que aceptar que es bueno por la calidad de los productores que contrató, pero su mala fama me ha hecho sentir reacio hacia su persona. A pesar de todo esto, debemos aceptar que todo le ha funcionado como publicidad… y siempre a su favor.
Y lo que acaba de hacer es eso, ser simplemente él en Instagram.

Un dios dorado pero lleno de tatuajes.
A través de su cuenta de Instagram, el astro juvenil se sacó la camiseta, algo que hace de costumbre, y reveló sus pectorales con dibujos a los humanos.

Lo comparo con la segunda venida de Jesucristo, en serio.
Creo que se parece bastante a lo que hizo Leonardo DiCarpio y Kate Winslet.

Pero, la gente, la misma que tanto lo ama, no piensa siempre lo mismo.
“Esos tatuajes se ven como la mierda amigo”.
Bueno en realidad encontré uno, pero creo que le filtran los comentarios groseros.
En realidad, encontré 2 comentarios negativos, pero el segundo es demasiado fuerte como para reproducirlos aquí.
Les puedo decir que tenía la palabra “sodomita” dentro del texto y le molestaba su posición de “Jesucristo”.
En fin, Justin no sólo vive de la música, los likes de Instagram también son su fuente de alimento.