¿Qué cara poner cuando te cantan?
Está bien, quizá suene un poco extremista decir que “odias tu cumpleaños”, pero la verdad es que te entiendo. Esa sensación de tener una vez al año un día en el que todos tus familiares y amigos como por deber tienen que hacerte sentir bien y atenderte, es realmente abrumadora. Sonreír aunque no tengas ganas, constantemente y agradecer hasta a gente desconocida que se entera de que es tu día antes que tu misma hermana -gracias, Facebook-, no es la mejor experiencia.
Igualmente sabes y agradeces de corazón que todo es por el cariño que ellos te tienen, pero la verdad es que si de ti dependiera, borrarías ese día y sólo te quedarías con los regalos.
Porque claro, eso sí que vale la pena.
Mira estas 8 nefastas razones y dime qué tan “Grinch de cumpleaños” eres.
1. Cuando se acercan las 24:00 horas del día anterior es como si fuera a llegar el Apocalipsis
A medianoche sólo quieres dormir, pero secretamente ves tu teléfono y si nadie te saluda, te sientes la persona más despreciada y olvidada del mundo.
2. El clásico curioso que lo grita al mundo
Has logrado estar tranquila todo el día sin que mucha gente lo note. Pero de un segundo a otro, un bastardo y curioso fanático de Facebook se entera de que es tu cumpleaños, y sin pudor alguno lo grita a viva voz para que todos en gran masa se sientan mal por no haberte saludado, y corran a donde te encuentres, felicitándote con incómodas excusas.
3. ¿Por qué celebrar mi vejez?
No entiendes por qué cumplir años es la gran cosa. Para ti es un día cualquiera, en el que hace muchos años alguna vez naciste. Lo ves como un mero trámite, y si fuera por ti, lo eliminarías de la faz de la Tierra.
4. Detestas el cariño “obligado”
Sólo porque es tu cumpleaños, tus seres queridos se vuelven locos por que disfrutes de cientos de atenciones que te dan, y si no lo hacen bien, ellos mismos se sienten del terror. Sólo quisieras que lo pasaran como un día más contigo, sin tanto cariño forzado y sacrificios porque tú recibas TODO lo que quieras.
5. Anti sorpresas
El decir que no quieres celebrarte el cumpleaños, para algunas personas suena a “por favor celébrame en secreto”, pero la verdad es que no es así. Si decides que necesitas relajarte y pasar un día tranquilo y más sencillo, llegar a tu casa y que todo el mundo esté allí esperando para celebrar en grande, es agotador, y debes empeñar tu mejor cara fingida de felicidad…
6. Tu teléfono se desborda en agotadoras llamadas
E incluso algunas son de teléfonos desconocidos. Hay ciertas llamadas que te alegran, pero la verdad es que la mayoría son agotadoras, ya que todos te preguntan lo mismo: ¿cómo lo has pasado?, ¿Qué te han regalado?, ¿Cómo vas a celebrarlo?…
7. ¿Qué cara poner cuando te cantan feliz cumpleaños?
Es TAN incómoda esa situación en que te cantan cumpleaños feliz con la torta y velas, y todos te están mirando, fotografiando y filmando. ¿Qué expresión se pone en estas ocasiones? Es algo así como sonrisa, sufrimiento, vergüenza, y todas las sensaciones mezcladas, junto a un rubor exagerado en tu rostro sin saber a quién mirar.
8. Está bien recibir regalos, pero es agotador sonreírles a todos y decirles que es el mejor que has recibido
Ese terrible momento en que la persona que te dio un regalo por tu día, se para en frente tuyo y analiza con detención tu reacción cuando lo abres. Aunque sea una roca, debes poner tu mejor cara y agradecerle infinito aunque lo detestes, por cortesía y para no romper su corazón.