Esto sucedió en la ciudad de Curanilahue, al sur de Chile, donde las 4 personas serán formalizadas.
Aunque se pueda tener compasión, empatía y solidaridad con las personas de pocos recursos, que se ven la obligación de pedir en las calles para aliviar su situación, se debe tener cuidado con no caer en las manos de estafadores.
Aunque en normal encontrar personas en las esquinas pidiendo algo de dinero para atender sus faltas de ingresos, por distintas razones, también es probable encontrarse con criminales que se aprovechan de esta fachada para engañar a ciudadanos solidarios. A veces son planes con mucha preparación.
Así sucedió en Curanilahue, en la región del Biobío, al sur de Chile, donde cuatro personas fueron detenidas por funcionarios de Carabineros, luego de encontrar que se dedicaban a la estafa con este método.
Ellos incluso contaban con bebés de mentira para que las personas cayeran en su trampa. Eran muñecas las cuales llevaban la vestimenta normal de un bebé, junto con un gorro para que no se le viera el rostro y no levantar sospechas.
No obstante, su engaño no llegó muy lejos. Fueron sorprendidos en la calle Ramón Rabal con Ramón Zamora, cuando los funcionarios de la policía los revisaron para determinar qué hacían.
“Carabineros detiene a cuatro personas por engañar a la comunidad estafándoles, pidiéndoles dinero, prendas de vestir y alimentos para sus hijos menores de edad”, declaró el mayor Jonathan Larraín, comisario de la Cuarta Comisaría de Carabineros de Curanilahue, según reseñó Tele 13.
“Una vez fiscalizados se percata que estos hijos son muñecas, engañando a la comunidad”, agregó Larraín.
Con esta estafa lograron reunir unos 200.000 pesos chilenos (260 dólares) en efectivo, además de mercadería y otros artículos, que recibían al asegurar que necesitaban atender a sus niños pequeños.
