A pesar de que la pareja tenía una reserva, los recepcionistas le negaron la entrada. “Fueron repugnantes”, contó la mujer.
Es materia conocida que existen restaurantes y hoteles lujosos que poseen estrictos reglamentos de etiqueta, es decir, que los clientes y comensales deben ir vestidos de alguna forma en particular, como por ejemplo, con ropa semiformal o formal.
Sin embargo, hay veces que los usuarios desconocen ese tipo de reglas porque no están claras. Eso fue lo que le ocurrió a una pareja que denunció que fueron expulsados del restaurant de un lujoso hotel solamente por su vestimenta.
Tal como informó el medio Tyla, se trata de Samantha Hyde y Samuel Beckett, pareja inglesa que gastó 372 dólares en una estadía de una noche en el lujoso Lifehouse Spa and Hotel, en Essex, Reino Unido.
Samantha y Samuel, quienes habían juntado dinero durante mucho tiempo para estas vacaciones, anhelaban poder disfrutar de una noche agradable, pero todo terminó mal.
La mujer explicó que reservaron un puesto en el restaurante y llegaron a la hora acordada. Pero cuando llegaron a la puerta, los anfitriones le negaron la entrada porque su pareja, Samuel, llevaba unas cómodas chanclas en vez de zapatillas o zapatos.
La recepcionista le dijo que no podían dejarlos entrara porque iba en contra del código de vestimenta. Posterior a eso, se les consultó si es que les gustaría cenar en su habitación o tomar otra hora de reserva para cuando el restaurante esté más vacío.
Esto enfureció a Samantha, quien describió la escena como “diabólica“. “Nos trataron como si hubiéramos estado haciendo algo ilegal e incorrecto. Arruinó todo el fin de semana que estaba destinado a ser una celebración“, explicó.
La página web del lugar dice que se admiten batas de baño y ropa deportiva, pero solo para el desayuno y el almuerzo.
Samantha explicó que siguieron haciendo su día normal, pero que luego de unas horas fueron a hablar sobre la situación en la recepción, lugar en el que los recibió un hombre a quien describieron como “desaliñado“.
“Su actitud hacia mí y mi pareja fue absolutamente repugnante. La forma en que nos menospreció y juzgó“, explicó la mujer.
Finalmente, la pareja hizo abandono del hotel porque no se sentían bienvenidos. El recinto no quiso darles un reembolso. Aunque el hotel fue consultado sobre esta situación, se negaron a hacer declaraciones hasta realizar una investigación de lo ocurrido.