Además, Aprille Franks también adquirió un coche de lujo. “Fue un error de aficionado en el banco (…) No infringí la ley y sí, tuve suerte. Bien por mí”, explicó la mujer.
No todas las personas protagonizan hechos que solamente se pueden atribuir a la fortuna, al azar o a la buena suerte. Sin embargo, hay quienes nacieron con algún tipo de varita mágica que los tocó y que logran salirse con la suya en los momentos más impensados.
Hace unos días fue el turno de Aprille Franks, una influencer de Estados Unidos que nunca se imaginó que su día tendría un giro positivo. Y cuando hablamos de positivo, nos referimos a las cifras en la cuent abancaria.
Esto porque, según información de Infobae, Aprille se dio cuenta que alguien le había depositado dinero por error. Pero no era cualquier suma, sino que se trataban de 50 mil dólares.
La joven intentó encontrar algún tipo de explicación en el depósito y llamó a familiares y amigos, pero confirmó que se trataba de alguien desconocido, así que era dinero que no le correspondía. En vez de devolverlo, Aprille decidió quedarse con el dinero y aprovecharlo.
Fue así que la influencer no dudó ni un segundo en adquirir dos casas y un auto sin enfrentar problemas legales.
Aprille llamó al banco para avisarles que se habían equivocado, pero la entidad insistió en que no era su responsabilidad y se trataba de un depósito que estaba dentro del marco legal. Ahí fue que prefirió no seguir con el problema y quedarse con el monto.
Su abogado le aconsejó que no tocara el dinero durante 30 días, y si es que nadie lo reclamaba, lo podía gastar. Luego de ese plazo, la mujer compró dos casas y revendió una de ellas, multiplicando su dinero.
“Cuando me llamaron, la razón por la que no enviaron a la policía fue porque no era un acto criminal. Fue solo un error de aficionado en el banco, como si quienquiera que estuviera a cargo de eso, no lo hubiese hecho bien“, contó la influencer.
A través de sus redes sociales contó lo sucedido en uno de sus videos y hasta mostró lo que hizo con el dinero. “No infringí la ley y sí, tuve suerte. Bien por mí. Así ha sido mi vida. Bastante afortunada“, cerró la mujer.