En su vida, la abuela ha sufrido de gripe española, cáncer, hemorragias internas, sepsis y COVID dos veces, entre otras enfermedades.
El cuerpo humano es una verdadera lotería. Así como podemos nacer con todo nuestro cuerpo sano, también existe la posibilidad de hacerlo con una enfermedad congénita, por lo que muchos no le tomamos el peso a tener un cuerpo saludable, más aún en un mundo donde estamos siendo atacado por una pandemia mundial y pertenecer a un grupo de riesgo es para preocuparse.
Pero existe una persona que las enfermedades no son motivo de miedo, y pese a tener 102 años de edad, está fresca como una lechuga. Hablamos de Angelina Friedman, una señora que ha sufrido a tantas enfermedades que necesitaría una libreta para mencionarlas todas.
Sobrevivió a la gripe de 1918 cuando era una bebé, al cáncer, hemorragias internas, sépsis y durante este año fue diagnosticada de COVID-19, dos veces.
Angelina es la única hija viva de un matrimonio con 11 hijas. Su madre murió al parirla y dos de sus hermanas la ayudaron a sobrevivir hasta reunirse con su padre.
Hoy vive en Nueva York y puede ser una de las pocas mujeres mayores de 80 años, que diga que ha vencido este 2020 a la enfermedad que es causa de muerte de más de más de 1,5 millones de personas en menos de un año. Su hija Joanne Merola se comunicó con el medio WPIX donde contó como su madre se contagió por primera y segunda vez.
La primera experiencia de Angelina, tras ser diagnosticada de COVID-19 fue en marzo, después de asistir al hospital por un tratamiento menor. Le hicieron las pruebas correspondientes y tras volver al centro médico y dio positivo. Fue allí que se extremaron los cuidados para la señora de 102 años debido a su historial médico.
Se le aisló en su habitación y padeció de fiebre intermitente durante algunas semanas. Fue recién el 20 de abril que se recuperó por completo. No obstante, en octubre volvió a dar positivo a las pruebas.
Fiebre y tos seca fueron esta vez los síntomas que sufrió la señora pero que no lograron abatirla. La veterana de las enfermedades se sometió a un segundo aislamiento que la tiene hoy recuperada en un 100%.
A su avanzada edad, ha perdido ya parte de su audición y es moderadamente ciega, aún así, su hija Joanne asegura que su madre es una fuente total de energía para toda la familia.