Por Cristofer García
20 January, 2022

Karla Salvador, a pesar de tener sus propias dificultades, ha acogido a los dos hijos de su cuñada luego de que ella los dejara por estar muy dentro en el mundo de los vicios. Le dieron un hogar a los pequeños.

Cuando lamentablemente las personas caen en el mundo de los vicios y la adicción necesitan del apoyo de sus seres queridos para poder superar esta etapa. En ocasiones quienes entran en esos problemas terminan afectados a sus familiares y personas su alrededor.

Así era el caso de la Carla, una mujer de Brasil que lamentablemente se volvió adicta a las drogas y llegó a un estado tan grave que no podía seguir cuidando a sus hijos. Fue ahí cuando su cuñada, Karla Salvador, apareció para hacerse cargo de los pequeños y los terminó por adoptar.

Karla Salvador

“No tenía hogar y era adicta al crack. Un día, estaba en el consultorio del dentista cuando recibí una llamada de Carla pidiéndome que fuera su acompañante en el hospital. Ella estaba dando a luz. Corrí al hospital de nuestra ciudad, Castelo, en Espírito Santo, y cuando llegué acababa de tener un niño”, relató Salvador, en conversación con Revista Marie Claire.

“Allí me di cuenta de que el bebé no tenía nada, ni ropa, ni pañales, ni chupetes. Nada. Mi esposo y yo pedimos dinero prestado y compramos un pequeño ajuar. Cuando los dos fueron dados de alta, fueron a nuestra casa y se quedaron allí durante 40 días“, añadió.

Sin embargo, cuando la mujer se recuperó solo se interesó en regresar a sus viejos vicios, evadiendo toda responsabilidad de cuidar a su hijo. Incluso, cuando la increparon, desapareció con el bebé, lo que le causó mucha preocupación a su familia.

Karla Salvador

“Fuimos a todas las tiendas de cigarros de la ciudad buscando a Carla y al bebé. Hasta que, en uno de ellos, encontramos a madre e hijo en una situación crítica. El niño estaba envuelto en una toalla sucia. Estaba drogada. Llevamos al bebé a casa y corrí hacia mi vecino para darle de comer. Bañamos al niño y le cambiamos el pañal y la ropa”, contó Salvador.

De esa forma, la cuñada se comunicó con el Consejo de Tutela, ante el cual luchó para que le quitaran la custodia del niño a la mujer. “Mi esposo y yo buscamos la custodia permanente del bebé para que pudiera quedarse con nuestra familia para siempre. Dos meses después, el fiscal de la ciudad nos otorgó la custodia temporal del bebé. Lo llamamos Pedro“, detalló.

El pequeño también había resultado afectado en su formación por el consumo de sustancias de su madre. “A causa de las drogas quedó con algunas secuelas y no desarrolló el habla. Pedro tiene rinitis, sinusitis, bronquitis y asma. También tiene autismo . Pedro necesita operarse para tener nuevamente la audición y solo no se ha operado todavía porque vino la pandemia y lo arruinó todo, pero voy a volver a entrar en los papeles para que mi chico pueda operarse y vuelva a oír”, dijo.

Pedro hoy tiene 5 años y vive junto a Karla, su esposo y la hija de ambos, Karolyna de 4 años y en mayo de 2021 recibió la sentencia a favor de la adopción de Pedro. “Sentí una sensación de alivio de tener a mis hijos conmigo, todos creciendo y bien cuidados“, expresó.

Pero no fue del único hijo de su cuñada del cual tuvo que hacerse cargo, porque a los días apareció Carla en su puerta con una bebé enferma para la cual le pidió ayuda. “Recogí a la niña y la llevé al hospital. Estaba muy enferma y el Consejo de Tutela dijo que podíamos quedárnosla”, recordó.

A pesar de las dificultades que atravesaban, porque aún se recuperaban de haberlo perdido todo en una inundación en 2019, Salvador no dudó en acoger a la pequeña a la cual llamaron Ketlin.

Karla Salvador

Actualmente Salvador se encuentra desempleada y lucha por sacar adelante a su familia con donaciones de la comunidad.

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