Michelle Arellano Guillén desde pequeña se diferenció de los niños de su edad y aprendió a leer y a escribir cuando tenía 4 años, para luego terminar la secundaria a los 8 años. Ahora quiere ser cirujana cardiovascular.
Hay niños que desde edades tempranas demuestran tener más destrezas y habilidades de aprendizaje que los niños de su edad. Se trata de aquellos alumnos que son superdotados y que se ubican en una escala de evolución más rápida que las estadísticas normales.
El caso de Michelle Arellano Guillén cabe dentro de esa categoría. Y es que esta niña se ha hecho conocida durante el último tiempo y ha hecho que sus padres inflen su pecho de orgullo luego de comenzar a estudiar Medicina a sus 9 años.

Según información de Uno TV, la estudiante originaria de Chiapas, México, tiene un coeficiente intelectual de 158 puntos, muy cercano al que tenía el científico Albert Einstein.
Desde que era muy pequeña que sus padres notaron que Michelle era distinta a los demás niños. No solamente tenía una aprendizaje muy rápido, sino que además su conocimiento se ampliaba hacia otras áreas del saber.

Su madre contó que cuando tenía un año y medio, Michelle ya hablaba un inglés fluído. Luego, al cumplir 4 ya aprendió a leer y escribir, mucho antes que sus demás compañeros de los primeros grados que cursó en su escuela.
Como notó que su hija estaba muy avanzada, decidió llevarla al sicólogo en donde luego de hacerle unas cuantas pruebas establecieron que la niña era “un adulto en chiquito“, según sus padres.

Ahí también sus padres se dieron cuenta que Michelle era en realidad una niña superdotada y que requería de otro tipo de educación para seguir motivando y promoviendo su desarrollo académico e intelectual.
De hecho, Michelle se aburría mucho en el aula porque aprendía los contenidos de la clase desde mucho antes.

Eso generó un problema en su familia porque al intentar cambiarse de colegio ninguna institución la aceptaba, por su alto IQ. Así fue que decidieron acudir a la Secretaría de Educación Pública de Chiapas, desde donde la ayudaron en su acelerado proceso educativo.
Michelle comenzó a pasar de grados rápidamente hasta que a los 8 años se graduó de la educación secundaria y de la preparatorio, lo que le ha permitido, a sus 9 años, postular y quedar seleccionada en Medicina en una universidad en Massachusetts, Estados Unidos.
