Daniel Neves fue diagnosticado con una extraña enfermedad en los riñones a sus cortos 8 meses de vida. Su cuadro más preciado es “Nuestra Señora de los Riñones”, el cual combina su deseo de sanar junto con la fe.
Nacer con una enfermedad extraña, se transforma usualmente para los padres en una desgracia, pero para el niño no es más que lo que le tocó vivir, siendo su realidad, lo que muchas veces lo impulsa y le da increíbles fuerzas para surgir pese a la condición. De ello sabe el pequeño Daniel, que a sus cortos 13 años ha demostrado tener un talento único y sacarle provecho para luchar contra su enfermedad.
Daniel Neves, un niño brasileño, vive prácticamente en un hospital. Debido a las largas horas estando internado, desarrolló una afición por el arte sin igual donde plasmó su mundo combinándolo con su fe. Con el tiempo creó auténticos cuadros religiosos que puso a la venta y que le han permitido pagar parte del costoso tratamiento de sus riñones.
Daniel padece de poliquistosis renal, fibrosis hepática y problemas de bazo, siendo diagnosticado a sus cortos 8 meses de vida. En su estado se ha visto obligado a pasar su vida en salas de hospital haciéndose distintas pruebas.
Proveniente de una familia humilde, el pequeño viaja cada 3 meses hasta la capital de Sao Paulo para realizarse sus tratamientos. El gobierno solo puede ayudarles pagándoles los boletos de autobús, mas todo lo otro, alimentación, hospedaje y hospital, sale del bolsillo de la familia.
Pero el talento del chico de 13 años deslumbraba no solo a los padres, sino a la gente que en general que veía sus cuadros religiosos. Una de sus más grandes obras es la apodada “Nuestra Señora de los Riñones” que dice ser su santo para cuando sea operado de un trasplante de riñón. La familia almacenó los cuadros de Daniele y le propuso venderlos para probar suerte.
Los cuadros no solo fueron un éxito, sino que abrieron una petición de donaciones por medio de una página web en la que cuentan el caso del niño y demuestran sus capacidades artísticas, logrando superar la meta de dinero.
Ahora Daniel debe prepararse para viajar a Tailandia, lugar en el que será operado como parte del tratamiento que promete le permitirá caminar con normalidad y vivir una vida larga y sana. El dinero que sobre de la operación estará destinado a conseguir los medicamentos que muchas veces no provee el gobierno brasileño, significando un confort para el presupuesto familiar.