En los días de lluvias, los niños de una precaria aldea de Vietnam cruzan un río dentro de bolsas plásticas. Una vez en superficie, deben caminar 5 horas en un camino de lodo para llegar a la escuela. Ellos sí que son un ejemplo de superación.
No importa de dónde vengas, necesitas educación para surgir en la vida. Este es un derecho universal, que nadie debería sufrir o pasar penurias para conseguirlo. Pero incluso, aunque tu condición sea muy humilde, si tienes las ganas de salir adelante y doblarle la mano al destino, te las ingenias de cualquier forma para continuar en la escuela.
Cuando llueve, los niños de la aldea Huoi Ha Village, en Vietnam, cruzan el río Nam Chim en bolsas plásticas para ir a la escuela.
Durante los días de sol, los menores se trasladan sobre este a través de improvisados puentes de bambú, pero son las precipitaciones las que les generan problemas.
El presidente de la comuna de Na Sang, Vang A Po, indicó al medio de comunicación Vov.vn que transportarse a través del plástico no es una forma muy segura. Lo mismo sucede si lo hacen en balsas, ya que se pueden volcar.
“Hemos advertido a los residentes locales sobre los riesgos latentes de viajar a través del arroyo con bolsas de plástico, pero el agua que fluye rápidamente también puede barrer las balsas, por lo que tienen que elegir esta manera. Anteriormente, una persona local resultó herida en una balsa volcada aquí”.
-Vang A Po, presidente de la comuna Na Sang-
Por su parte, la máxima autoridad del distrito de Moung Cha, Nguyen Minh Phu, manifestó al mismo sitio que esta modalidad no es común, y que se debe usar sólo cuando el flujo es alto e inseguro para hacerlo a través del puente de bambú.
Después de cruzar el río, los estudiantes deben caminar durante 5 horas por un terreno resbaladizo hasta llegar a la escuela. Permanecen en el recinto educacional toda la semana y regresan el fin de semana a ver a sus familias.
Los lugareños han propuesto crear un puente permanente para este cruce, pero no tienen financiamiento de una entidad. Se estima que para esto se necesitarán cerca de 272 mil dólares. Además, conseguir los materiales de construcción en una carretera estrecha y resbaladiza de 12 km es muy difícil. El distrito espera obtener pronto fondos por parte del gobierno para este proyecto.
No importa si no vienes de una familia adinerada o no tienes dinero. Sólo basta con tener las ganas de surgir en la vida y tú mismo te abrirás un infinita gama de posibilidades para estudiar. Ni el frío ni la lluvia podrán detenerte en este objetivo. Tú eres el dueño de tu destino. Sin duda, el esfuerzo de estos niños será recompensado y se convertirán en grandes profesionales.