Leila y Danny Abdallah le dieron la bienvenida a su séptima hija luego de pasar por lo que ningún padre desea. Sienna, Angelina, Anthony y su prima Veronique fallecieron a causa de un conductor ebrio en la calle, algo que golpeó a la familia, pero han salido adelante sin olvidarlos.
Los momentos tristes hacen pensar que la vida no vale la pena y que las buenas oportunidades se acaban, pero no es algo que debiera definirlo.
Cada persona decide qué hacer luego de pasar por un incidente difícil de superar, como la pérdida de un ser querido. Los hijos de Leila y Danny Abdallah fallecieron el 2020 en un grave accidente en Oatlands, Sídney (Australia) a causa de un conductor que manejó en estado de ebriedad, mientras ellos solo caminaban para comprar helado.
Sienna, Angelina y Anthony, quienes no superaban los 13 años de edad, perdieron sus vidas junto a su prima Veronique Sakr de 11 años. Un hecho que derrumbó a sus padres y los marcó con algo imposible de olvidar.
Salir adelante en una situación así no es nada fácil, Leila y Danny se tomaron su tiempo para sanar de a poco sus heridas, pero no significaba que iban a olvidar a sus pequeños.
Con el apoyo de sus otros hijos tuvieron la energía y ganas de superarlo y continuar con sus vidas en vez de rendirse. La mayor, llamada Liana, inspiró a la madre a tener un bebé y rezó para que sucediera. De esta forma, le dieron la bienvenida a su séptima hija para comenzar un nuevo episodio, manteniendo el recuerdo de Sienna, Angelina y Anthony.
La bebé nació sana y pesando 3 kilos, quien se volvió una nueva esperanza para los padres. “Gracias a Dios salió bien, me sentí tan surrealista cuando la vi por primera vez. Es hermosa, me sentí tan feliz que lloré de alegría”, dijo Leila a Daily Telegraph.
En el momento que llegó al mundo la sostuvieron en sus manos y la contemplaron, encontrando en ella todas las respuestas de porqué vale la pena continuar y siempre intentarlo.
“Ella nos ha enseñado que la vida nos golpea con cosas malas, pero que no debemos rendirnos, nos sentimos realmente bendecidos. Es nuestra séptima hija, una niña, casi me quedo sin palabras”, comentó la mamá al mismo medio, y agregó “No puedo creer lo bendecidos que somos después de todo lo que hemos perdido. Continuará con los recuerdos de Sienna, Angelina y Anthony”.
No planean llamarla con el nombre de sus hijas fallecidas, ya que no lo consideran correcto y quieren tener un buen comienzo, por lo que dejarán que Liana lo elija. Vendrán grandes momentos llenos de amor y alegrías, con los recuerdos puestos en sus corazones.