La planta luffa cylindrica, es el sustituto natural e ideal de las esponjas sintéticas, que duran hasta 100 años en degradarse.
Bien sabemos que apartarnos de los productos a los que estamos habituados, es todo un proceso. Es cambiar costumbres, cambiar usos, planificaciones, no es algo de un día para otro. No obstante, existen una gama de artículos que sustituyen en gran forma a los que utilizábamos comúnmente. Por ejemplo ahora es costumbre llevar al supermercado una bolsa de tela, en vez de las plásticas.
O también las compañías de agua potable han sustituido (algunas de ellas) los envases plásticos por otros de vidrio. Una línea que deberíamos intentar seguir y respetar, ya que el plástico en su mayoría de presentaciones, puede durar hasta más de 100 años en degradarse. Hoy, te presentamos una alternativa tan económica como natural, la luffa.
Tambien conocida como lufa o luffa cylindrica, es una planta de la misma familia del pepino y la calabaza. Pero con la diferencia de que su fruto seco, es ideal para productos de baño o de limpieza.
“Hace algunos años el producto se vendía principalmente por sus propiedades exfoliantes. Hoy la gente ha tomado más consciencia y las usa para lavar vajilla, como implemento de aseo, para el cuidado de la piel, como materia prima para decorar e incluso como material aislante. Las ventas han crecido y ahora existe más interés del retail y puntos de venta naturistas por entregar esta opción de consumo”, indicó Francia Cozmar a Planeta C.
Para cultivarla, hace falta primero dar tres meses de crecimiento a las semillas tras sembrarlas. Luego que esta suelta sus primeras flores, las convierte en frutos que pueden ser consumidos o utilizados como esponjas. Los mejores ejemplares se encuentran luego de los 6 meses.