Durante todo ese tiempo, Mickael, de 9 años, fue víctima de bullying por sus compañeros, quienes se burlaban de él diciéndole que “parecía niña”. Aunque nada de eso importó porque sabía que todo valdría la pena cuando hiciera feliz a alguien con su cabello donado.
Mickael José es un niño brasileño de 9 años que cuando tenía apenas 6 tomó una de las decisiones más importantes de su vida: donar todo su cabello a personas con cáncer, pero, ¿por qué un ser tan pequeño llegaría a esa determinación?
Según lo informado por G1, Mickael quedó profundamente conmovido tras enterarse que su transportista escolar sufría de esta enfermedad.“Llegó a la casa y dijo: mamá, la ‘tía’ se enfermó y ya no me voy a cortar el cabello, se lo voy a donar, porque lo va a necesitar“, indicó Roseneia Bueno, su madre.
“Eso fue una sorpresa para mí, por el gesto, ¿sabes? Entonces fue a hablar con la ‘tía’, y ella le dijo: si quieres dejarte crecer el cabello para donar, puedes. Pero la ‘tía’ no tendrá tiempo. Lamentablemente, su situación ya era muy grave”, manifestó.
Lamentablemente, durante la pandemia la transportista falleció, y aunque eso entristeció mucho al pobre pequeño, no lo hizo cambiar de opinión. Seguiría dejando crecer su pelo para ayudar a la gente como su querida tía.
No obstante, el proceso no fue fácil, ya que tras volver a la escuela después de que se levantaran las restricciones por la pandemia, Mickael comenzó a sufrir de bullying por parte de sus compañeros, quienes se burlaban de él diciéndole que “parecía niña”.
“Él fue al baño y los chicos querían que se fuera, decían que no era un ‘lugar de chicas’, solo un lugar de chicos. Trató de explicar que era un chico y que iba a donar su cabello, pero aun así los niños se burlaban de él”, dijo Roseneia.
Así pasaron tres años donde el niño tuvo que soportar todas esas “bromas”, pero él siguió adelante con determinación. Nada lo detuvo hasta que llegó el momento de cortar toda su larga cabellera. “Cumplí el deseo de mi corazón, porque estoy haciendo bien a alguien que recibirá mi cabello para hacer una peluca. Me sentí feliz”, explicó Mickael.