Me sucede todo el tiempo cuando la gente descubre la edad que tienen mis hijos.
“Espera. ¿Cuántos años tienes?”
Sé que la gente no pretende nada malo cuando lo dice, pero ya se está convirtiendo en algo molesto para mí.
No tenía 16 cuando tuve a mi primer hijo (¡tenía 19!) Pero aún si hubiese tenido 16, ¿realmente es asunto de alguien? Estoy en el partido de baloncesto de mis hijos, voy a los conciertos y a las conferencias de padres e hijos de la misma forma que tú. Me preocupo de igual manera que tú.
Estoy siendo una madre. Exactamente igual que tú.
Sé que tienes buenas intenciones. Y estoy segura que mucha gente intenta decir el “oh mi dios, eres tan joven” como un cumplido (Sí, sí, lo apreciaré en 10 años. Pero ahora no).
Pero aquí hay un par de razones de por qué no deberías lanzar un grito ahogado cuando descubras que una mamá es tan joven:
1. Cuando dices que soy muy joven para tener hijos me dan ganas de pegarte. Claramente, estás equivocado, porque tengo hijos más grandes que los tuyos y están muy bien educados.
2. “Cuando tenía tu edad…” Bueno, ¿adivina qué? Cuando tenga tu edad, mis hijos tendrán 20. No se ve tan mal ahora, ¿no?
3. Me desacredita como madre y no me gusta. Sólo porque me quedé embarazada joven no significa que estoy esforzándome menos que tú. Es como si me estuvieses diciendo que mi edad es muy inmadura para hacerse cargo.
4. Hace una generación o dos atrás, las niñas se casaban a los 16 y tenían hijos más rápido de lo que mi hijo se devora una pizza. No estoy diciendo que así deberían ser las cosas, pero no soy la primera mujer en tener un hijo a los 19.
5. Pese a que me tiente, nunca respondería a tu “eres tan joven” con un “no, es que tú eres muy vieja”.
Respeta el viaje. Estamos todos en él. No importa tu edad cuando lo comiences; 19, 27, 42, todos somos padres.
Además, puede que aprendas algo de mí.
Visto en Scary Mommy.