Literalmente se formó una enorme fila.
Dentro de todas las virtudes que se pueden rescatar de Internet en los momentos que más se necesita, sobresale el de las colectas virtuales en las que todas las personas podemos ayudar desde cualquier rincón del mundo. Así se recaudan fondos a través de la red desde centavos hasta miles de dólares.
Amanda, que fue diagnosticada con una enfermedad, recurrió a este sistema para recolectar fondos y tratarse.

Estaba sentada en una cafetería local al lado de su esposo, Clint, y Amanda comenzó a hablar a la cámara para presentarse y explicar el mal que la aquejaba.
Le preocupaban sus hijos y que no contaba con algún seguro médico.

Estaba muy sensible hablando de su enfermedad y de la incertidumbre que encierra su devastadora enfermedad. Además admitió que se sentía muy asustada.
Mientras grababa lo que creía que era el video de presentación de historia para la colecta virtual (Go Found Me), fue interrumpida por una mujer de gran sonrisa que colocó un billete de 100 dólares sobre su mesa. Sus hijos hicieron lo mismo.

La mayor sorpresa fue cuando apareció más gente que estaba allí para colocar billetes sobre la mesa de la pareja.

Se formó una fila de extraños dispuestos a dejar una cooperación para el tratamiento de Amanda. Ella y Clint estaban emocionados y conmovidos hasta las lágrimas.
