25 personas, la mayoría jóvenes, fueron detenidas en un bar que funcionaba de manera clandestina. El local apodado en clave como “El Refri” contaba con un refrigerador modificado para que las personas entraran por la parte trasera y así evitaran sospechas.
Pareciera ser que el encierro prolongado a causa de la pandemia ha provocado en las personas una necesidad por querer salir de fiestas. Lamentablemente este tipo de decisiones ha causado, con el tiempo, que se disparen los casos de contagios por COVID-19. Lo más insólito es lo que acaba de suceder en una ciudad mexicana, donde la gente creó un acceso ilegal hacia un bar para realizar fiestas.

Fueron al menos 25 personas encontradas a altas horas de la madrugada celebrando dentro de un bar clandestino, conocido como “El refri” en Pachuca, México. El operativo llevado a cabo por la policía detectó actividad sospechosa en un recinto que supuestamente tenía las puertas cerradas, y es que, la gente no usaba otro mecanismo para entrar.
El recinto contaba con un refrigerador, modificado para que las personas lo abrieran y pasaran a través de él, por la parte trasera, sin embargo el ruido fue difícil de disimular y con el tiempo los vecinos se dieron cuenta de que algo raro pasaba.

El operativo logró desalojar el lugar que contaba, en mayoría, con jóvenes, quienes ya fueron puestos en custodia y a disposición de la justicia. La policía ya clausuró el recinto y cerró las entradas, pero hasta el momento se desconoce desde cuando estuvo el bar operando.
La escena no dejó dudas de que tanto los organizadores como los asistentes al bar tenían claro que la ciudad de Pachuca tiene prohibido todo evento masivo, así como el funcionamiento de cantinas, centros nocturnos, bares e incluso la venta de bebidas alcohólicas, puesto que no son un producto esencial.

La detención de estas 25 personas se da en un contexto en que la ciudad mexicana atraviesa una fuerte crisis a causa del COVID-19, contando ya con 30 mil casos de infectados y más de 4 mil fallecidos. El alcalde, Sergio Baños, se refirió a la situación como insólita y que seguirán los esfuerzos por controlar que se cumplan las medidas sanitarias correspondientes.