Los conflictos amorosos serán el menor de sus problemas (y eso que son terribles).
La nueva temporada de “Las Chicas del Cable” llegó a impresionarnos esta Navidad pasando del trío romántico entre Lidia (o Alba), Carlos y Francisco, a un thriller donde las amigas se unen más que nunca para esconder un gran secreto. ¿Cuál? El asesinato de alguien que todas ellas presenciaron y que están determinadas a dejar en el olvido.
Si no la han visto aún, entonces no les diré de quién se trata, pero de todas formas, todo girará en torno a eso. Si bien en un comienzo puede parecer un poco extraño cómo se desarrollan los hechos luego del final de la primera temporada que nos dejó a todos colgados, la trama va tomando forma a medida que avanzan los minutos.
Pese a que el trío amoroso se deja un poco de lado, continúa siendo parte importante del show. Como ya hemos podido ver en los adelantos, Carlos está furioso con Lidia y quiere vengarse luego del robo de los planos del rotary. Mientras, Lidia parece tener más que buenas migas con Francisco, pero este la traicionará para demostrar su fidelidad a Carlos.
Por su parte, las chicas están atormentadas al tener que esconder este gran secreto que empieza a generarles problemas en otros aspectos de su vida. Carlota se interioriza en la diversidad sexual, pero tiene problemas con Sara, Marga no da más de los celos por la ex novia de Pablo y Ángeles se siente atraída por un oficial de policía del que se debe a la vez cuidar si no quiere acabar en la cárcel.
Como toda serie española, “Las Chicas del Cable” presenta una historia cautivante con carismáticos personajes y una siempre rigurosa puesta en escena con bellos escenarios, fieles al tiempo en el cual se ambienta el show. La vestimenta, los espacios e incluso la manera de hablar nos hacen sumergirnos en esta telenovela de época.
Sin embargo, ni la primera ni la segunda temporada del programa de Netflix se acercan a magnitud de las grandes producciones españolas como “El Gran Hotel”, “Velvet” o “El tiempo entre costuras”. Sí es una buena introducción para espectadores del resto del mundo, que, si disfrutan de este, entonces deben adentrarse en el mundo de las historias televisivas de aquel país, que verdaderamente entregan una lección de época, amor y belleza.
La segunda temporada de “Las Chicas del Cable” es más innovadora, la disfrutarás y querrás continuar viéndola, pero, como recomendación, si esta te gustó entonces parte de inmediato a ver otro show español que de seguro te dejará atónito.