Patricio Borguetti, del programa mexicano Venga la Alegría, intentó decirle a Bailey que había quedado fascinado por su trabajo en La Sirenita, aunque parece no haber elegido muy bien sus palabras, ya que dio a entender que por su tono de piel, no muchos le tenían fe.
En el mundo de la televisión y el entretenimiento, las declaraciones y acciones de los famosos a menudo se ven envueltas en controversias, y eso fue justamente lo que le ocurrió al conductor y actor argentino, Patricio Borghetti.
Esto ocurrió durante una entrevista a la talentosa Halle Bailey en el programa mexicano Venga la Alegría, todo en medio de su visita al país para promocionar el próximo estreno del remake live-action de La Sirenita, donde ella es la protagonista.
“Tuve la suerte de ver la película. Es algo que te quiero compartir, y te lo prometo, nadie de los que estábamos en esa sala estábamos viendo el color de tu piel. Mi esposa y mis hijos estábamos perdidos en el color de tus ojos”, indicó el hombre.
Borguetti, en un intento de comentarle a la joven que habían quedado fascinados por su trabajo en la película, parece no haber elegido muy bien sus palabras, lo que molestó a cientos de personas, quienes incluso lo acusaron de racista, ya que con este comentario habría insinuado que el color de piel de Bailey era algo sorprendente/inusual, y que por lo mismo podría no haber tenido un buen desempeño.
“Se sabía que iban a salir al menos con un comentario racista en Venga La Alegría”, “Y la musiquita conmovedora, como si la estuvieran halagando”, “Tantas cosas por decirle o preguntarle y [le dice] ESTO” y “Venga la Alegría be like: ‘Cantas tan bonito que por un momento hasta se nos olvidó que eras negra ‘”, comentaron diversas personas.
Aún así, Bailey parece no haberse tomado tan mal las palabras, por lo que simplemente dijo: “Eso significa mucho para mí, me siento muy agradecida, de que estuvieras ahí y que hayas visto la película”.
Es comprensible que algunas personas hayan interpretado el comentario de Borghetti como un intento de minimizar la importancia de la representación de una mujer negra en este icónico papel. Sin embargo, también es posible argumentar que el conductor simplemente intentaba destacar la calidad interpretativa de Bailey y el hecho de que su actuación había capturado la atención del público más allá de su apariencia física.