Por Ronit Rosenberg
14 November, 2018

Desde prótesis de nariz, dientes falsos, hasta movimientos inspirados en Liza Minnelli.

La biopic de Freddie Mercury, Bohemian Rhapsody, ha dividido a la crítica. Mientras algunos concluyeron que parecía más bien una “reseña de Wikipedia”, otros determinaron que era una gran producción que hace muy fácil olvidar a ratos que no se está viendo a la verdadera Queen. Sin embargo, en lo que todos convergen es en la estupenda y magnífica interpretación de Rami Malek como Freddie Mercury.

El actor se ha llevado todos los elogios, incluso se habla de una posible carrera al Oscar. Y cómo no, si su actuación es verdaderamente sorprendente. A pesar de que físicamente no se parece mucho al vocalista -a diferencia de los otros miembros de la banda, quienes lucen idénticos a los reales- su transformación fue igualmente ejemplar porque logra convencer absolutamente de que él, aunque sea por esa hora y media, es Freddie Mercury.

Peter Still/ 20th Century Fox

Desde luego habían actores que sin tanto maquillaje ni prótesis podrían haberse acercado más al físico de Mercury, como Sascha Baron Cohen (Borat). No obstante, dudo que alguno lo haya interpretado tan bien como lo hizo Malek. Hizo un casting que duró 6 horas, y para prepararlo se estudió minuciosamente la vida, pensamientos, características y movimientos del artista.

Wireimage /20th Century Fox

Malek debió someterse a cambios importantes físicos: le pusieron peluca, prótesis de nariz, dientes falsos -la característica física más prominente del vocalista- y debió adelgazar. Y desde luego se logra un buen trabajo. Eso sí, lo más increíble está en cómo pudo replicar -sin caer en exageraciones burlonas- los icónicos movimientos de Mercury sobre el escenario, sus muecas, y su esencia en general.

20th Century Fox / BBC

Tomó clases intensas de canto y piano, y trabajó con la famosa coreógrafa Polly Bennet, quien lo animó a estudiar el desplante y movimiento de Jimi Hendrix, David Bowie y Liza Minnelli; artistas que a su vez inspiraron al verdadero Mercury.

20th century Fox

Interpretar a un hombre tan aclamado y único como Freddie no es una tarea fácil para nadie. Y menos si es que no hay ninguna biografía oficial de su vida, dado lo joven que murió. Pero Malek se aferró a las canciones más profundas del artista, como You Take my Breath Away, para conocer más su lado íntimo.

A pesar de que Mercury se presentaba siempre como un hombre extravagante, “Soy una prostituta musical, querida”, tenía un alma profunda y sencilla, la que daba a conocer a retazos en este tipo de canciones, a diferencia de letras como “Another One Bites the Dust”, donde salía su lado más rockero.

Peter Still / 20th Century Fox

Definitivamente, durante la última escena de la película, en el concierto en Wembley de Live Aid en 1985, a uno se le olvida que no se está viendo la presentación original de Queen. Tanto por la magnífica interpretación de Malek, replicando con cordura cada palabra al más puro acento de Freddie, “¡Awlright!”, “Eo-Eo”, como por el cuidado de cada detalle de la puesta en escena. Sino me cree, vaya a youtube y compare con el archivo original: es alucinante.

Sin duda, Malek se merece, al menos, estar nominado como mejor actor para los Premios Oscar.