Max Gutiérrez, un barman de St. Petersburg, Florida, se llevó aplauso en redes sociales por ofrecerle su ayuda a una de sus clientes. Actuó de manera respetuosa y atenta, hasta que tuvo que echar al hombre que causaba los problemas.
Los bares y ambientes donde la gente va a consumir alcohol son siempre vistos por todos como los lugares donde vamos a pasarlo bien luego de nuestra jornada laboral, o para celebrar que nos reunimos con algunos de nuestros amigos. Pero debido a las características del alcohol (las mismas que nos hacen sentirnos relajados, confiados y cariñosos), estos lugares también pueden tornarse sin mucha dificultad en focos de problemas, especialmente cuando personas difíciles insisten con seguir molestando a los que están tranquilos.
Esa fue la experiencia que se llevó Trinity en un bar de St. Petersburg, Florida, Estados Unidos. Una experiencia que si no fuera por los mismos encargados del bar, podría haber sido realmente problemática.
La historia la contó la chica en su Twitter, donde detalló como al estar sentada en la barra, un hombre no dejaba de molestarla. Ella le hizo entender de buena manera que no le interesaba seguir hablando, pero él insistió. Fue ahí cuando Trinity notó que el barman se le acercaba, ofreciéndole, entre todas las cosas, la “receta” del trago que estaba tomando.
Fue cuando Trinity lo leyó, que descubrió lo que realmente decía:
“Si este tipo te molesta, ponte la cola de caballo en el otro hombro y haré que te lo quiten. A mí está causando molestia”
–Mensaje del barman, reproducido por Trinity en su Twitter–
Ella tomó la oferta del barman e hizo la “señal”, logrando que su acosador fuera echado del establecimiento. Cuando el barman volvió, Trinity le dio las gracias, pidiéndole que le dejara sacarle una foto a su mensaje.
La historia tuvo un éxito inusitado en las redes sociales, explotando con más de 20 mil compartidos por el Twitter de Trinity:
“Quiero ser amiga del chico con la camisa hawaiana! Me sentiría segura cerca de él luego de saber que hizo esto por ti”
–Amber Dillon por Twitter–
“Él es un gran barman”
–Petzilla por Twitter–
Un par de días después, el mismo Max, el heroico barman, contó su parte de la historia por Internet:
“Es algo que se aprende de otros barman. Al rato uno aprende a manejar el lenguaje no verbal, las posturas del cuerpo, etc. Este tipo me estaba pareciendo extraño hace rato, así que le puse un ojo encima. Le traté de dar la oportunidad de que se calmara, dejé que las chicas le dijeran que era suficiente, pero no hacia caso así que lo tuve que regañar y pedir que se fuera. La verdad que no me gusta regañar personas o avergonzarlas, pero es la mejor manera de lidiar con los que causan problemas. Avergonzarlos en público suele funcionar para hacer que se vayan y dejen en paz a los demás”
–Explicación del barman Max Gutiérrez, reproducida por Trinity en su Twitter–
Como dijeron algunos de quienes comentaron, los héroes a veces visten camisas hawaianas.