El pequeño, tras enterarse que el camarero con el que hizo una gran amistad, tenía que caminar varios kilómetros para ir al trabajo, decidió ayudarlo a recaudar dinero para que pudiera comprarse un auto y mejorar así su estilo de vida.
Auxiliar al prójimo es una acción que siempre debe ser merecedora de recibir aplausos, aunque este no sea el objetivo principal necesariamente, ya que al asistir a los más necesitados, la mejor recompensa es saber que se encuentran bien, luego de haber pasado por una situación difícil.
Esto es algo que entendió muy bien un niño de Estados Unidos, quien luego de enterarse que un mesero, que lo atendía muy bien en su restaurante favorito, estaba pasando por un mal momento, no dudó en echarle una manito amiga.

Según Today, el niño Kayzen Hunter, de tan solo 8 años, se enteró que su “mesero favorito”, Devonte Gardner, se encontraba en un aprieto y decidió ayudarlo, recaudando más de 66.000 dólares a través de un ‘GoFundMe’, dinero que destinaría en comprarle un vehículo para que él pueda ir a trabajar.
Kayzen y su familia tienen como tradición ir casi todos los fines de semana a desayunar a Waffle House de Little Rock, Arkansas. Es aquí donde conoció a Devonte, con quien rápidamente estableció una buena relación. “Fue hace aproximadamente un año cuando se conocieron. Mi papá empezó a ir y Kayzen iba con él. Cuando llegó a casa, habló sobre Devonte y cuánto le gustaba”, dijo la madre del pequeño, Vittoria Hunter.

Gardner, por su lado, también tiene una percepción similar hacia él: “Es un niño maravilloso. Me cuenta chistes cada vez que entra, como, ‘Oye, Devonte, tengo un chiste para ti’, y lo siguiente que sabes es que nos reímos”.
La situación del trabajador era bastante complicada, pues el antiguo departamento en el que él y su familia vivían estaba plagado de problemas, por lo que se tuvo que mudar lejos y no contaba con un automóvil para desplazarse por la ciudad.

“Queríamos encontrar algo asequible, así que nos mudamos a un área de bajos ingresos”, dice Gardner. “Nos cansamos de las infestaciones de ratas y cucarachas y todo este moho negro. Mis hijas se estaban enfermando. Sin calefacción y cosas así. Cuando hacía frío afuera, teníamos que abrigarnos con cuatro o cinco mantas para mantenernos calientes”, añadió.
Al enterarse de esto, el infante habló con sus padres y empezaron a hacer la colecta a través de Internet. “Ayuda a Devonte a conseguir un automóvil familiar”, decía la descripción con la que pretendían recaudar en un inicio cerca de 500 dólares.

“Devonte es un padre trabajador con dos niñas pequeñas y una esposa. Es un trabajador dedicado y tiene que caminar o pedir que lo lleven para ir al trabajo todos los días”, agregaba. Finalmente, la meta fue sobrepasada e incluso consiguieron multiplicarla.