Puede que Salma Hayek se haya ido de México, pero México nunca se fue de ella.
Para la noche de los Premios Oscar, Salma Hayek dio cuenta de su sensualidad y elegancia con un anaranjado vestido Gucci de lentejuelas y escote. Posó en la alfombra roja como una verdadera profesional y presumió su curvilínea figura solo como Salma sabe hacerlo.
Y se robó rápidamente las miradas.
Sin embargo, entre tanta pose y espectáculo, a Salma, como cualquier otra persona, le bajó el hambre, pero hambre de algo bueno, algo rico y algo ligado a sus raíces mexicanas.
Y no dudó en dejar de lado el glamour para darse un gusto y satisfacer el hambre que sentía. Como cualquier persona después de un evento.
A través de Instagram, la actriz mexicana les demostró a todos sus seguidores que, pese a haberse ido de México y vivir en Estados Unidos, en realidad México nunca se fue de ella. Y que los burritos, los buenos burritos, siempre son lo primero en la vida.
“Feliz de seguir manteniendo el glamour pero primero lo primero”, escribió junto al video en el que aparece feliz comiéndose un burrito después de los Oscars.
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El registro rápidamente se llenó de comentarios de los fans, quienes destacaron la humildad de la actriz.
“El hambre es hambre sin importar que tan glamouroso uno vaya”, “te entiendo, es que uno no se llena con lo que dan en las fiestas”, “Salma representándonos a las mujeres cuando llegamos a casa después de una fiesta”, “eres humilde mi chiquita, el orgullo más grande de México”, “más real que Salma”, y “Salma me representa”, comentaron algunos fans.
Y tú, ¿qué opinas?
