“Dave Grohl se enteró de lo que estábamos haciendo y quería ayudar. Si eso no es un héroe, no sabemos qué es”, comentaron desde la fundación que se dedica a alimentar a gente sin hogar en Los Ángeles, Estados Unidos.
En el mundo existe mucha gente que, por diversas razones, queda en la calle, sin hogar y sin siquiera poder alimentarse, lo que debería ser satisfacido por cualquier persona porque es una necesidad básica para vivir.
Es por esto que muchos donan dinero, ropa o comida a fundaciones que ayudan a estas personas, incluso asistiendo de forma voluntaria para apoyar en la distribución de todos estos artículos. Siendo el más complejo, probablemente, lo de la comida, ya que no muchos se ofrecen para pasar bastantes horas del día preparando alimentos para los necesitados.
Sin embargo, hubo una celebridad que lo hizo una vez y, tan solo una semana después, volvió a sorprender a sus fanáticos al cocinar nuevamente para la gente sin hogar de las calles de Los Ángeles, Estados Unidos: Dave Grohl, el reconocido vocalista de Foo Fighters.
En esta ocasión, el cantante apoyó a la fundación Feed The Streets, donde en una sesión maratónica, pasó 18 horas preprarando una gran barbacoa para alimentar a cientos de personas, quienes hicieron largas filas en un parque para recibir su porción.
“2023 ha tenido un comienzo difícil (…). Hemos estado tratando de averiguar formas de seguir el ritmo de nuestras activaciones y seguir poniendo 3.500 comidas al mes. No es una tarea fácil, especialmente cuando varias comunidades que experimentan inseguridad alimentaria dependen de nosotros para una comida decente cinco veces a la semana”, comentaron.
“En uno de esos días húmedos y fríos lluviosos recibimos un texto de nada menos que Dave Grohl —dijo que escuchó lo que estábamos haciendo y quería ayudar. Lo lanzamos a una próxima activación. Pasó 18 horas seguidas ahumando pechuga, costillas y cerdo—con un equipo de cocina”, indicaron.
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“Se quedaron despiertos toda la noche hasta la salida del sol. Al día siguiente, Dave y su equipo, agotados y privados de sueño, empacaron la comida y la condujeron hasta MacArthur Park. Todo lo que tenían que hacer era dejarlo e irse, sin embargo decidieron quedarse y trabajar en la línea para servir la barbacoa con nuestro equipo hasta que todos en el parque fueran alimentados”, agregaron.
