Ahora que dio a luz a su hija por parto natural, espera poder tener relaciones con su marido.
Aunque tener relaciones sexuales es algo totalmente natural, no todos pueden lograr tener una. Y no se trata de no tener pretendientes, sino de condiciones médicas que así lo impiden. Suena sorprendente, pero es real.
Tanto hombres como mujeres pueden haber sufrido ciertos traumas o tener ciertos miedos que impidan que se genere la penetración. En las mujeres se manifiesta como vaginismo, y sucede cuando se genera una contracción involuntaria de los músculos de la vagina, haciendo imposible el intimar.
Bien sabe de ello Revati Bordawekar, de Ahmednagar, India, una mujer que supo que algo andaba mal el día que intentó ponerse un tampón. Era solo una adolescente cuando lo intentó, pero no pudo lograrlo. Sentía mucho miedo de introducirlo, su mano comenzó a temblar y los músculos de su vagina se contrajeron tanto, que no pudo ponérselo.
Sin embargo el problema continuó a tal punto que jamás pudo tener relaciones sexuales… aunque eso no fue un impedimento para casarse a sus 25 años con su actual esposo llamado Chinmay.
Si bien la pareja intentó de todo para tener sexo, les era imposible. Fue tanto que decidieron acudir al médico en busca de una explicación, y fue allí cuando Revati fue diagnosticada con vaginismo.
Pero el problema mayor de tener esa condición era que el matrimonio quería formar una familia y soñaban con tener hijos. Entonces, los médicos a modo de solución, le removieron el himen a la mujer e intentaron dilatarla, pero aún así no pudo intimar con su marido.
Desesperada buscó grupos de mujeres con su misma condición en redes sociales y preguntó por formas alternativas de embarazarse. Así optaron por la fecundación in vitro… y al segundo intento, Revati quedó embarazada.
Pero entonces aparecía un desafío muchísimo mayor: debía dar a luz a su bebé.
Si bien podía optar por la cesárea, ella quiso que fuera parto natural, así que se preparó psicológicamente para el momento y cuando llegó el día, tras 48 horas de trabajo, Eva nació el pasado 9 de febrero.
Si bien no pudieron concebir a la bebé por medio de relaciones sexuales, sí pudo darla a luz por parto natural… así que ahora confía en que podrán intimar sin mayores problemas. “Siempre me digo a mí misma que si pude sacar a un bebé de 2,7 kilos y una cabeza de 33 centímetros de circunferencia, fácilmente puedo aceptar un pene adentro mío“, afirmó la mujer.