“Él quiere que le muestres”, le dicen a la mujer.
Era el año 2015 y la mujer oriunda de Indiana, Estados Unidos, se encontraba quemando basura cuando una mala maniobra provocó un accidente que la dejaría marcada para siempre. De pronto se vio envuelta en el fuego, sufriendo quemaduras en sus brazos y pecho.
Después de someterse a un tratamiento en un centro de quemaduras local, Darci y su novio Jason decidieron desahogarse y tratar de divertirse mucho. Así que se dirigieron al Zoológico de Indianápolis y pasearon por la exposición de primates.
En ese momento la muchacha estaba cubierta de vendajes y notó que uno de los orangutanes se interesaba particularmente por ella.
El primate se alejó del grupo y se acercó hasta donde ella estaba, se pegó al vidrio para tener una “charla” con Darci y Jason y sin querer capturaron un mágico instante.
La mujer fue hasta el vidrio que los separaba, el orangután de 12 años, conocido como Rocky, comenzó a examinar sus vendajes. “Él quiere que le muestres”, dijo Jason. “¡Eso es una locura! Él quiere verlo”, añadió.
Darci se quitó las vendas para mostrarle a Rocky sus quemaduras y cicatrices. Rocky se mostró cada vez más curioso, presionándose contra el cristal y apuntando a los brazos y su pecho de ella.
La “conversación” entre el simio y Darci duró cerca de 20 minutos y a medida que pasaban los minutos, los demás asistentes al zoológico se fueron reuniendo alrededor para observar.
Los cuidadores del zoológico dicen que Rocky es un simio notoriamente curioso, y definitivamente intentaba comunicar su preocupación e interés.
La curiosidad y preocupación de Rocky hicieron que Darci se sintiera mucho mejor respecto a sus quemaduras, ya que se sintió reconfortada por él.