Un profesor de Derecho en el estado de Michoacán anunció en un chat con sus alumnos que rifaba sus cachorros, incentivando la compra de números al anunciar que obtendrían bonificaciones en sus calificaciones, algo que no cayó bien a muchos.
Tener mascotas es toda una responsabilidad y hay quienes son amantes de que sus animales crezcan y se reproduzcan con tal de que tengan su propia familia. También existen dueños que permiten a sus peludos tener hijos y pero luego los dan en adopción, y además existe un tercer grupo de gente que encuentra una oportunidad económica en los cachorros recién nacidos, algo bastante repudiado por una gran cantidad de animalistas.
Pues resulta que en el estado de Michoacán, México, estudiantes universitarios denuncian a su profesor de Derecho luego de que éste le ofreciera a sus alumnos sus cachorros a cambio de comprarle su rifa, la cual tenía como premio instantáneo subir sus calificaciones a final de semestre.
A modo de publicación en un chat, el docente, cuyo nombre permanece anónimo durante la investigación, subió fotografías de los cachorros recién nacidos anunciando una rifa que venía organizando y para ello proponía un valioso incentivo.
El maestro les comentó por chat que la venta de números ya estaba abierta y para lograr venderlos con rapidez, propuso que todos aquellos que no ganasen, obtendrían de todas maneras una bonificación en sus calificaciones. Sin embargo, lo que el docente creía era una excelente campaña de marketing, se transformó en una denuncia por redes sociales.
Según contaron los estudiantes al medio Contramuro, la propuesta la habría hecho además en varios salones, en sus distintas clases. Cuando fue confrontado por alguno de sus alumnos, se justificó diciendo que eran perros recogidos de la calle, algo que parece no coincidir con las imágenes compartidas, donde se ven canes bien cuidados dentro de un terreno privado.
De acuerdo a las denuncias anónimas, el profesor de derecho vendía a 100 pesos mexicanos el boleto de rifa, dentro de las mismas instalaciones de la Facultad de Derecho de la Casa de Hidalgo.
Los jóvenes notificaron estos hechos a la dirección administrativa de la institución educacional, pero por el momento no han sido tomados en cuenta. Como estudiantes esperan que de alguna manera la justicia les permita dar un paso más directo y lograr alguna sanción para el profesor, puesto que consideran que se trata de un claro caso de abuso animal.