Con una soga que se hundía cada vez más en su cuello, esta pequeña solo lloraba con la esperanza de ser encontrada. Rescatistas escucharon sus ladridos y la liberaron para darle una nueva vida.
Todo el tiempo estamos enfrentados a situaciones indignantes contra los animales porque, siempre hay algún peludo que está siendo víctima del maltrato o del abandono. Sin embargo, es importante recalcar a todas aquellas personas que los rescatan y les dan una segunda oportunidad.
Así le ocurrió a una cachorra en el sur de Asia luego de que rescatistas recibieran el llamado de que un perro estaba viviendo en una casa vieja después de escuchar ladridos durante varios días seguidos.
Resulta que la pequeña de solo algunos meses de vida, fue abandonado en una casa vacía pero no solo este es el acto de maldad, sino que además la o las personas que lo hicieron, la amarraron para que no pudiera escapar.
Luego de que los rescatistas entraran a la vieja casa —que de seguro estaba abandonada por varios años— no creían que estuviera un perro viviendo ahí hasta que escucharon los ladridos. Bajaron al sótano y encontraron a la cachorra atada sin poder moverse a ningún lado.
Con una cuerda, la amarraron desde el cuello a un pilar para que no pudiera escapar. Por eso, de inmediato los rescatistas la soltaron y le quitaron la soga del cuello.
La cuerda que cruzaron en su cuello había sido atada con tanta fuerza que llegó a incrustarse en su piel y dejó la piel en carne viva y muy adolorida.
De inmediato el grupo de rescate la llevó a un veterinario, donde trataron su herida y le dieron la alimentación adecuada para que pudiera recuperar su peso y crecer de forma correcta.
Afortunadamente, se recuperó de su herida en el cuello y recibió un certificado de buena salud, por lo que ya es una perrita que vive una vida feliz y saludable.
Por el momento, se desconoce quién ató y abandonó a esta pobre cachorra en esta casa desierta, y si bien la pequeña ya se encuentra a salvo, estos casos no deberían quedar impunes nunca.