Atendiendo la denuncia de un robo, los oficiales se percataron de un triste y suave gemido. Al verificar vieron al pobre perrito en un claro estado de desnutrición.
Durante una llamada por un presunto robo en la ciudad de New Castle, la policía no pudo hallar al ladrón pero encontró algo más terrible dentro de la casa. Dentro de la casa había una pequeña perrita encerrada y su estado era tan deplorable que los huesos quedaban a la vista.
Según la vicepresidenta de Lawrence County Humane Society, Elissa Druschel la perrita a penas vio a los guardias se sintió protegida. Se arrastró con las pocas fuerzas que le quedaban hacia ellos y movía su cola sin parar.
Era difícil hacer que levantara su cabeza o caminara, estaba realmente débil. Sin saber si lo lograría ella no dejó de mover la cola nunca, quería vivir.
La pequeña a quien llamaron Miranda, tiene 10 semanas de edad y según los cálculos veterinarios, duro al menos tres largas semanas encerrada. Pero gracias al cuidado y alimentación de la fundación y los policías ya ha duplicado su peso y sus ojos brillan de nuevo.
El equipo de rescate publicó su video en Facebook, su historia llegó a los corazones de todos quienes mandaban cartas, dibujos y colaboraciones para sus cuidados.
Muchos querían adoptarlos pero sus rescatistas se sintieron muy a gusto con ella, eran la primera opción pues le brindaron una oportunidad en la vida. Uno de los oficiales la tiene en casa y le brinda todo el amor que ella merece.
“Casi de inmediato me di cuenta de que quería adoptarla. Estoy feliz de llevarla a casa. Ella nunca verá ese tipo de vida que tuvo nunca más. Ella será el perrito más mimado que jamás hayas visto”.
-Oficial Mark.