A su corta edad, ambos han vivido tristes experiencias.
Ellas son Laura y Marina, dos bebés que han logrado encontrar en la otra la compañía que necesitaban tras vivir una trágica experiencia. Marina, la gata, fue encontrada abandonada en la calle cuando sólo llevaba pocos días de nacida. Laura, la cerdita, fue rescatada por un grupo de activistas de una granja productora de carne. La historia de Laura es desgarradora, ella no se suponía que sobreviviría. Cuando estaba en la fábrica viviendo junto a su madre y hermanos, le cortaron la cola y los dientes sin anestesia, y mataron a muchos de sus hermanos sólo por ser más débiles. En cuanto a su madre, aún se encuentra en ese terrible lugar, viviendo en una jaula donde ni siquiera tiene espacio suficiente para moverse.

Cuando Marina llegó al Santuario Igualdad Interespecie, ubicado en Santiago de Chile y dedicado a rescatar principalmente a animales de granja, no sabían si lograría sobrevivir.
“Estaba muy enferma, con los ojos llenos de pus y no tenía ninguna posibilidad de sobrevivir. Afortunadamente, una persona de buen corazón se cruzó en su camino y al ver la dramática situación de esta bebé, decidió no seguir de largo ni hacer la vista gorda, sino llevarla consigo con la esperanza de ayudarla a tener una vida más justa”.
–página de facebook Santuario Igualdad–

Para Laura, la situación no fue muy diferente. Los cerditos dependen del calor corporal que su madre les da así que en el santuario, sus cuidadores se encargaron de conseguirle abrigo y de entregarle todo el cariño que podría necesitar.
“llegó al santuario triste, desanimada, y temblando de miedo”
–cuenta uno de los trabajadores en el santuario–

Pero no pasaría mucho tiempo antes de que estas dos pequeñas se encontraran. Y desde entonces, han encontrado junto a la otra paz y una amistad incondicional. Ambas son los animales más jóvenes que habitan en el santuario y a través de las actualizaciones que continuamente publican en su página del santuario, le han demostrado al mundo que no sólo son los animales capaces de olvidar cualquier diferencia que exista entre ellos, sino que además un cerdo es puede llegar a ser tan cariñoso, atento y leal, como cualquier gato o perro domesticados. Si no lo crees, sólo míralas en este video:
Dos bebés dándonos una lección de amor <3La cerdita Laura fue salvada de terminar en el plato de alguien. Cuando tenía pocos días de vida, activistas la rescataron de un criadero cerdos y la trajeron al santuario para que pudiera tener una vida digna.Desde su llegada, Laura ha sido tratada con todo el cariño y el cuidado que una bebé merece, y ha formado una profunda amistad con la gatita Marina, demostrándonos con su ejemplo, que cuando se trata de relaciones de amistad y respeto, no importa la especie a la que se pertenezca 🙂
Posted by Santuario Igualdad Interespecie on jueves, 28 de enero de 2016
En el santuario están encantados con el lazo que ambas han formado.
“Desde su llegada, Laura ha sido tratada con todo el cariño y el cuidado que una bebé merece, y ha formado una profunda amistad con la gatita Marina, demostrándonos con su ejemplo, que cuando se trata de relaciones de amistad y respeto, no importa la especie a la que se pertenezca”
–página de facebook Santuario Igualdad–
Y las pequeñas pasan todo el día juntas, ya sea durmiendo una siesta.

Alimentándose por biberón.

O simplemente, siendo felices.
