Por Lucas Rodríguez
24 July, 2020

Sammy fue rescatado en el ocaso de su vida. Creyeron que pasaría sus últimos años en el refugio, pero Tim Adams decidió darle un oportunidad. Nunca más se separaron.

La relación que tenemos con las mascotas, es una que muchas veces puede ser algo desigual. Es cierto que los perros siempre nos devolverán tanto o más cariño como el que les entregamos. Pero con los gatos la cosa es un poco menos predecible. Todos conocemos a esas personas que aseguran que una tierna gatita o un juguetón gato gordo son las estrellas de su hogar. Pero basta con ver un gato en las calles, y acercarnos para hacerles algo de cariño, para darnos cuenta que no son animales demasiado sencillos. 

Tim Adams

Los expertos dicen que la clave para crear relaciones duraderas y afectivas con un gato, es comenzar lo antes posible. No es que los gatos no sean cariñosos o sean fríos de corazón, sino que son muy conscientes en su elección de a quien le quieren dar el privilegio de su lealtad y cariño. En ese sentido, es muy similar a lo que nosotros hacemos al momento de elegir parejas con las que envejecer juntos. 

Tim Adams

Por eso es que la historia de Sammy, un gato negro con rayas blancas que lo hacen asemejarse a una persona vestida con un smoking, es bastante peculiar. El gatito vivió en las calles durante toda su vida, siendo rescatado cuando se encontró herido por el refugio de Purrfect Pals Cat Sanctuary and Adoption Centers. Ellos lo llevaron a sus oficinas, donde lo sanaron y dieron agua y comida. 

Tim Adams

Cuando revisaron sus dientes, notaron que a pesar de su apariencia juvenil y energía, Sammy era un gato bastante adulto. Calcularon que su edad debía andar cerca de los 18 años. Esto no solo significaba que ya estuviera lejos de crear nuevos lazos de vida, sino que también, no le quedarían demasiados años sobre la tierra. 

Tim Adams

Se prepararon para tener a Sammy con ellos hasta el fin de sus días. Pero los planes de Tim Adams eran muy distintos. El hombre ya había tenido antes a un gato anciano, por lo que tuvo un acercamiento directo con Sammy. El gato notó esto, ya que le dio más atención y se dejó tocar más que con cualquier persona.

Tim Adams

Tim no lo pensó dos veces y adoptó a Sammy. El gato de 18 años ahora viviría con él. Lo que no se esperó es que su nueva vida inyectara de vitalidad al gato. Sammy acaba de cumplir sus 20, una edad a la que muy pocos gatos llegan.

Tim Adams

Lo que más llama la atención, es que el felino sigue siendo un ejemplo a seguir de cariño y lealtad. No hay siesta que no pase sobre el pecho de su dueño y no hay caricia que no lo lleve a una intensa sesión de ronroneos. 

 

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