Sus colores rosa y amarillo brillante, junto con su peludo cuerpo, fueron lo que llamó principalmente la atención de Lahiru Perera.
La naturaleza siempre nos puede sorprender por lo abundante que es, y sin necesidad de hacer un largo y costoso viaje a otro país o ciudad para conocer nuevas especies de plantas y animales que no se ven en el lugar donde vivimos.
Y prueba de ello ha sido la anécdota de Lahiru Perera, un hombre originario de Colombo, Sri Lanka, que estaba paseando por su jardín cuando notó algo extraño y que nunca antes había visto en medio de la hierba, por lo que se acercó a averiguar.
Al observarlo detalladamente se sintió aún más sorprendido, ya que parecía ser un pequeño juguete peludo de color rosa y amarillo muy brillante.
Pero todo cambió en cuanto este ‘peluche’ dejó ver sus alas.
De inmediato a Lahiru le quedó claro que no era ningún juguete ni accesorio, era un ser vivo bastante extraño pero hermoso por sus radiantes colores.
Realmente no pasaba desapercibido para el ojo humano.
Para Lahiru y cualquiera que respete a la naturaleza, este insecto era maravilloso, aunque la historia no acabó ahí. Después de descubrirlo, la pequeña visita del hombre de a poco empezó a experimentar una interesante metamorfosis.
De a poco fue extendiendo sus alas, las cuales pasaron de ser diminutas a literalmente grandiosas con sus colores, tamaño y forma. Ante esto, Lahiru no desaprovechó la oportunidad de tomar un par de fotografías para compartirlo en un grupo de Facebook.
“Perdón por la sobrecarga de imágenes, pero pude presenciar lo que pensé que era increíble. Pude presenciar a este pequeño extendiendo sus alas. Lo que comenzó como una cosa con alas diminutas que estaba siguiéndome, se convirtió en esta hermosa criatura”, escribió en la publicación.
Y para quienes nunca antes habían visto a este peculiar insecto, dio a conocer su nombre: polilla rosada del arce.
Según Australian Geographic, la polilla rosada del arce proviene de América del Norte y, como indica su nombre, comúnmente suelen encontrarse en los árboles de arce.
Además se tratan de criaturas nocturnas con un tamaño de 5,2 cm, cuyo color suele variar desde el amarillo brillante como el de las fotos, hasta crema pálido con distintos tonos rosa en sus alas y patas.
Junto con sus colores, también son destacadas por su peludo cuerpo similar al de un peluche, el cual les ayuda a polinizarlas flores de forma más eficiente.
Y aunque el motivo de sus tonalidades es todo un misterio, se cree que es para camuflarse entre las flores.
Mientras que las imágenes de Lahiru cautivaron a más de un usuario en Facebook.
“Los tenemos donde vivo. Mis hijos siempre las llamaban polillas de algodón de azúcar“, “Alucinante. ¡Qué cosa tan fantástica para ser testigo de una polilla tan hermosa!”, “Tan hermosa, nunca había visto algo así“, “¡Eso es tan lindo! Mi hijo miró por encima de mi hombro y preguntó ‘mamá, ¿ese es un nuevo Pokémon?‘”, fueron algunos de los comentarios.
Y probablemente muchos pensamos cosas parecidas al ver esta magnífica y adorable polilla.