Sonia es una mujer de 60 años que vive en situación de calle junto a su única compañía, su perro. Debido a las fuertes lluvias usó bolsas de basura para cuidar de ambos, pero dadas las bajas temperaturas, la policía le solicitó retirarse a un lugar más seguro.
Vivir en la calle nunca es fácil. Las razones por las que las personas pueden terminar en dicha condición pueden ser múltiples y por lo mismo nunca podemos generalizar. Cierto es además, que conseguir compañía una vez en calle es complicado, las personas se aferran a lo poco que tienen y con ello nace la desconfianza, es por esto mismo que a veces los mismos animales vagabundos crean lazos con los menos afortunados.
Sonia, una mujer de 60 años lleva tiempo viviendo sin hogar, su única compañía es su perro a quien ama por sobre todas las cosas y por lo mismo lo cuida incluso de las condiciones extremas del invierno, informa Milenio.
Situada en una calle de la colonia Zona Norte de Tijuana, México, fue descubierta instalando un refugio construido con bolsas de basura para resguardarse a ella y a su mascota de las fuertes lluvias y las bajas temperaturas.
Lo anterior llamó la atención de la gente, quienes preocupados llamaron a las autoridades para que la trasladasen a un sitio seguro. Las condiciones no estaban dadas para que sobreviviera una noche más, por lo mismo se le comunicó que se dirigiera a un albergue. Sonia por otra parte temía la presencia de la policía y no quería ser arrestada, lo único que hacía era sobrevivir.
La mujer aseguraba que esperaba a su hija, quien nunca llegó y media hora después lograron convencer a la mujer de que consiguiera un techo y que podía hacerlo junto a su perro. Sin embargo Sonia no les indicó que la llevaran a un albergue para personas en situación de calle, sino a un domicilio particular, donde efectivamente vivía un hijo suyo.
Así como Sonia, son muchas las personas que viven en calle pese a tener alguna red de contacto, el por qué abandonan sus hogares sigue siendo un problema de múltiples factores. Lo importante es brindar apoyo, haciendo el esfuerzo en vez de excluirlos de la sociedad.