El can estaba dentro del automóvil en una estación de servicio cuando fue robado. Tenía los vidrios abajo para que pudiese respirar.
Una vez que un perro llega a tu casa, pasa a formar parte de tu familia. Se hace tu hermano o amigo, un ser que por nada del mundo quisieras perder. Lamentablemente hay personas malas que los roban sin pensar en nada más que sus ganancias, tal vez por la raza que tienen o simplemente por hacer daño a otros.
Aaron Morris tuvo que sufrir esta pérdida de su perra de servicio y peor aún, Jolene, como se llama la mascota, tuvo que sentir cómo la arrebataron de su dueño.
De inmediato Aaron comenzó a buscarla y a publicar su fotografía, no se rendiría hasta que su mascota volviera a casa y eso rindió frutos. Alguien encontró a Jolene en Tennessee, muy lejos de su hogar, pero este desconocido la llevó a Morristown Hamblen Humane Society.
A la perrita le habían arrebatado el collar con su contacto, por lo que la sociedad humanitaria recurrió a Facebook para localizar a su dueño.
Por suerte muchos se conmovieron con el caso y compartieron, hasta que de algún modo la información llegó a Aaron, quien la buscó inmediatamente. El reencuentro fue algo muy hermoso, la perrita corrió a sus brazos y no dejó de lamerlo en ningún momento.
Estaba muy emocionado de tener a su fiel compañera Jolene a su lado, aunque le pidieron información para verificar se notaba que eran amigos.
Ella al verlo no pudo contener la emoción en ningún momento, estaban felices de al fin estar juntos y seguro deseaban que nadie más los separaran. Hasta ahora no se sabe qué motivo al robo de Jolene y por qué fue abandonada tan lejos de su hogar.
Sin embargo, la policía logró identificar al ladrón y está haciendo todo lo posible para encontrarlo. Uno de sus detectives colocó su número a disposición para que se comuniquen con él.
El robo de perros es algo grave, no se trata de una simple posesión que le arrebatan a una persona sino que es un ser vivo que sufre y siente como cualquier otro. Alguien que tiene una misión especial en el hogar en el que se encuentra, por lo que los cargos para estos casos deberían ser de secuestro.