Por Luis Vargas
7 abril, 2025

Los visitantes que veían a la perrita en el refugio no pudieron notar su cualidades, ya que su deformidad de nacimiento implicaba para ellos un problema. Sin embargo, todo mejoró para ella cuando una familia pudo ver lo bueno en que tenía y decidió adoptarla dandole mucho amor.

A pesar de que muchos consideran que los perros son el mejor amigo del hombre, la cantidad de estos que se encuentran sin hogar y refugios es bastante grande, además de los muchos que viven en la calle y están a su suerte y sin cuidado.

Por otro lado, tener a estos animalitos en casa es cada vez más común e incluso, hay familias que los tienen de 2 o más, casi un jauría. El problema viene cuando algunos se ponen exquisitos con sus preferencias, acogiendo sólo a los que son de raza y comparándolos en los criaderos.

Facebook: Rescue Dogs Dream, Inc.

Es en este contexto donde un perrita que lamentablemente terminó en un santuario animal, se encontró con la desventaja de no poder conseguir un hogar con facilidad por un defecto físico que tuvo de nacimiento. Sin embargo, su suerte cambió cuando una personas con un corazón enorme decidieron tomarla e incluso, le hicieron una cirugía.

Según Fox 35, Dutchess, quien luego fue llamada Lena, fue entregada a los Servicios para Animales del Condado de Orange, en Florida, Estados Unidos. Ella había nacido con ligeras deformidades debajo de ambos ojos.

Facebook: Rescue Dogs Dream, Inc.

El establecimiento dijo que Lena era «perfecta», ya que tenía un comportamiento dulce, enérgico e inteligente, algo que desafortunadamente los visitantes no pudieron notar ya que sus prejuicios no les dejaba ver más allá de la imperfección cosmética.

«Se ve tan fea», «¿Qué es eso? ¿Qué le pasa?», «¿Está ciega? ¿Cuánto me va a costar esto?», eran alguno de los comentarios que estos solían hacer al verla. Pero ellos no se dieron por vencidos y luego de publicar una hermosa foto de ella en Facebook, rápidamente consiguió alguien que la amara de verdad.

Facebook: Rescue Dogs Dream, Inc.

Sus nuevos dueños la sometieron a una operación para extirpar la anomalía que de hecho no le permitía ver bien.

Ellos comentaron que Lena es «la perra más dulce que hemos conocido«. Añadieron además que: «Ella ahora tiene una nueva mamá y papá para mimarla (el papá trabaja desde casa) y tiene un nuevo hermano con quien jugar, en su jardín cercado de privacidad. Ella puede hacer caminatas y aventuras y es una parte querida de la familia».

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