El can pesaba 40 kilos y estaba próximo a ser sacrificado, pero la familia que lo adoptó decidió luchar por él. Gracias a una dieta estricta y un régimen de ejercicio diario, logró llegar a los 12 kilos, su peso ideal.
Wolfgang era un perrito con obesidad mórbida que pesaba 40 kilos cuando se encontraba en un refugio de animales. Nadie quería adoptarlo y estaba a poco de ser sacrificado, cuando, como por obra del destino, llegaron sus salvadores: Chad Schatz y Erin McManis.
La pareja de Arizona, Estados Unidos, decidió darle una oportunidad al can y lo llevaron con ellos a su casa, donde comenzaron un increíble cambio, el cual le hizo perder 27 kilos gracias a una dieta estricta y un régimen de ejercicio diario.
Tres años han pasado desde el inicio de aquel viaje y, en medio de la celebración del Día Nacional de Concientización sobre la Obesidad de las Mascotas, la pareja decidió mostrar en Instagram la gran transformación física de Wolfgang, quien ahora se encuentra saludable con sus 12 kilos de peso.
En el video inicia mostrando al beagle caminando con mucha dificultad debido a sus 40 kilos y finaliza con el can corriendo velozmente en un patio con su peso ideal. Llega a ser difícil pensar que ambos son el mismo perrito y que solo bastó una familia preocupada para cambiarlo tanto.
Chad y Erin dejaron un mensaje en Instagram (el cual está escrito desde la perspectiva de Wolfgang), hablando sobre los peligros de la obesidad en los animales y dando gracias a quienes los han apoyado en todo este tiempo.
“Mis padres me dijeron que era lindo desde el momento en que me recogieron en el refugio (incluso cuando tuvieron problemas para subirme a su auto). Decían que era tan único que era un unicornio. Si bien todos los perros son lindos, la obesidad extrema en los perros no lo es”, indicaron.
“Es negligencia o abuso. Incluso un poco de peso extra en un perro puede agregar mucho estrés en las articulaciones del perro. Mi familia ciertamente no es experta en el tema, pero tratamos de responder a tantos mensajes como podemos cuando las personas tienen preguntas sobre cómo ayudar a un perro a perder peso”, agregaron.
Destacando además que comenzar dando pequeños y constantes pasos, pueden lograr grandes cambios, como los de Wolfgang, por ejemplo, quien logró algunas “principales victorias”, tales como pasar por la puerta de perros, caminar su primera milla y completar sus primera carrera de 5 km.
Schatz y McManis llevan criando diversos animales desde 2009 y, con arduo trabajo, han logrado rehabilitar a cinco perritos obesos, incluso antes de la llegada de Wolfgang.