“¡Encontraron a mi bebé!”, gritó la dueña al ver a los bomberos y rescatistas aparecer con su cachorro en brazos. Ya había perdido las esperanzas.
Cuando ocurre una catástrofe mayor, muchas veces debemos dejar de lado algunas consideraciones que son parte de nuestro día a día. Especialmente cuando vemos que nuestro hogar nos está poniendo en riesgo, como puede ocurrir en un incendio o un derrumbe, lo que debemos hacer las personas es priorizarnos unos a otros. Por mucho afecto que tengamos hacia un objeto, nuestra prioridad es ayudar a nuestra familia.
Donde esto se pone un poco más difícil de dirimir es cuando tiene que ver con las mascotas.
Para cada vez más personas, los animales son parte de sus vidas tanto como cualquier otro miembro directo. Aún así, las recomendaciones de los expertos señalan que si estamos frente a una emergencia, los animales tienen que venir después de los seres humanos. Esa fue la difícil decisión que tuvo que tomar una mujer llamada Didi Fritts, de Seattle, Estados Unidos.
Cuando su casa se derrumbó luego de un incendio, ella tuvo que apurarse para salir con sus hijos y marido. Lo difícil de esta decisión, es que no tuvieron tiempo para hacer lo mismo con su hermoso labrador negro.
Los bomberos y rescatistas acudieron a la casa para tratar de salvar las cosas de importancia, cosa de que Didi y su familia pudieran resumir sus vidas de la mejor manera posible. Junto con esto, estaban atentos a la aparición del labrador.
Los días fueron pasando sin que hubiera señal del cachorro. La familia comenzó a hacerse a la idea de que no lo verían más.
Fue en el sexto día que ocurrió algo cuasi milagroso: los bomberos emergieron de los escombros con el adorado perro de la familia en sus brazos. Uno de los bomberos contó a un canal de medios locales cómo fue el momento en que dieron con el perro desaparecido:
“Esta mañana oímos un pequeño grito y luego no oímos nada cuando llegaron los bomberos con las motosierras. Desmontamos todo el piso, la sacamos y tenía el espacio justo para sobrevivir, así que no fue aplastada… Supongo que estuvo sobreviviendo con el agua de la lluvia los últimos dos días”
–Miembro del cuerpo de bomberos de Seattle, para King 5 News–
Los dueños no podían creer lo que venían sus ojos, cuando su asustado cachorro pudo ser regresado a sus brazos. Estaba hambriento, sucio y herido, pero estaba de regreso con ellos.