Kaiser estaba patrullando las calles junto a su oficial en Orpington (Inglaterra) cuando, al tratar de reducir a un hombre que estaba en medio de una crisis mental, fue acuchillado. Por suerte el perrito aguantó y logró la detención de este hombre, que espera la resolución de las autoridades sobre su futuro.
Hay veces en que la suerte puede hacer milagros y evitar desenlaces fatales. Ese fue el caso de Kaiser, un perrito pastor alemán del equipo canino de la policía de Orpington (Londres, Inglaterra), que zafó de un final muy morboso luego de ser apuñalado más de cinco veces en la cabeza.
El perrito está ahora en recuperación luego del ataque, después de haber recibido varios puntos de sutura. Y la verdad es que tiene mucha suerte de poder seguir cumpliendo con la ley, ya que en cualquier otro caso no la hubiese contado dos veces.

Kaiser estaba patrullando las calles de Orpington con el oficial Mark Woolcott hace unos días cuando, a eso de las 23:00, se encontraron con un intruso en el jardín trasero de una casa. El perrito fue a atacarlo y reducirlo de inmediato, pero no contó con que el hombre estuviese armado y recibió las mencionadas puñaladas, cinco en la cabeza y una abajo de uno de sus ojos.
El animal, a pesar de estar evidentemente lesionado y débil, logró contener al hombre hasta que llegaron los oficiales para arrestarlo. Luego, se llevaron a Kaiser de inmediato al veterinario, donde el médico determinó que las puñaladas habían chocado con el hueso de su cráneo y no habían causado ninguna lesión de mayor gravedad. De acuerdo a los reportes, se espera que el perro se recupere completamente.
“Quiero rendir un homenaje a Kaiser y al oficial Woolcott por la gran valentía que demostraron al reducir a este hombre armado. Kaiser fue apuñalado varias veces en la cabeza y tiene suerte de estar vivo (…) los eventos del pasado domingo son un recordatorio de los riesgos que nuestros hombres, mujeres y animales enfrentan en la primera línea”.
—Emma Richards, superintendenta de Fuerzas Especiales de la policía británica, vía Evening Standard—

Por otra parte, Richards comentó que el hombre que atacó a Kaiser estaba sufriendo una crisis de salud mental; ahora mismo está recuperándose y en los próximos días se decidirá si su estado es motivo suficiente para enviarlo a la cárcel.