Alimentarlos mucho no quieren decir que están saludables. El peso inicial de Trojan equivalía al de un elefante bebé, así que los voluntarios de RSPCA lo ayudaron a adelgazar por su bienestar. Ahora está en búsqueda de un nuevo hogar.
La mayoría de los perritos que llegan a los distintos refugios del mundo están en un estado de salud críticos, suele ser muy común que estén delgados pero hay otros que llegan con demasiado peso, lo cual también necesita de atención urgente.
Trojan es uno de los tantos canes que la organización animal Royal Society for the Prevention of Cruelty to Animals (RSPCA) ha recibido, y llamó la atención por su enorme cuerpo. Este pesaba 101 kilos, además de que su pelaje estaba enmarañado y sucio.
Estaba tan gordo que le costaba mucho moverse, pero llegó a las personas correctas porque los voluntarios se propusieron adelgazarlo por su bienestar y pueda ser más independiente. Como señaló The Dodo, su peso equivalía al de un elefante bebé y no al de un perro, así que era un deber ayudarlo.
Trojan necesitó de las cosas básicas para cumplir su objetivo, comer más saludable y hacer ejercicio para hacerlo bien, como explicó Nicola Anthony, supervisora de la perrera de RSPCA. “Ha necesitado un año, una dieta muy especial y un régimen de ejercicio para ayudarlo a perder peso de forma lenta y segura; y ahora pesa casi la mitad de su peso original”, detalló Nicola a The Dodo.
En ese plazo, Trojan logró bajar a 59 kilos. El plan fue todo un éxito, ya que pesaba prácticamente el doble que eso y su cuerpo se moldeó mucho mejor. Ya podía ponerse de pie por sí solo, caminar y correr libremente a sus 10 años de edad.
“¡Afortunadamente, no ha perdido su gran carácter!”, dijo Nicola a The Dodo. Ya que la misión está cumplida, hay un nuevo objetivo por lograr y es encontrarle una familia que lo acepte tal cual es, ya que además padece de artritis y tiroides, por lo que sus futuros dueños deben ser comprensivos con él.
A pesar de que es viejito, tiene todavía mucha energía y es un candidato perfecto para quienes buscan un fiel compañero. “Todavía es fuerte y le gusta dar paseos cortos, caminar por el jardín y olfatear. Se lleva muy bien con otros perros, pero no le gusta que lo salten por todos lados, así que se lleva mejor con perritos tranquilos y respetuosos”, detalló Nicola al mismo medio.
Un perrito con una admirable historia y que merece todo el amor del mundo.