En un emocionante video, el pastor alemán Bei Bei hizo todo lo posible por evitar que su amado entrenador, el sargento Zhang Wei, dejara las barracas. Ambos se separaron entre lágrimas y ladridos desesperados, recordando los gratos momentos que pasaron juntos en la milicia.
Las despedidas siempre son dolorosas, ya que son el momento en que se concreta una separación que bien puede tener fecha de vencimiento o no. Son momentos llenos de emociones a flor de piel y demostraciones de cariño, y si no lo creen, les dejamos este clarísimo ejemplo proveniente de China.
Zhang Wei, sargento del ejército, se retiraba de sus labores y debía dejar las barracas ubicadas en Xinjiang, región ubicada al noroeste del país asiático. A su vez también dejaba atrás a Bei Bei, un pastor alemán parte del equipo canino del ejército, que había trabajado por años junto al sargento como su perro de detección.
La despedida, que fue grabada en video y publicada en la red social Weibo, mostró a Zhang haciendo el traspaso oficial de su perro a uno de sus colegas, preparándose para dejar el lugar definitivamente.
Cuando Zhang abrazó a otro oficial para despedirse, el perro se dio cuenta de que algo andaba mal y, antes de que se alejara, le mordisqueó el bolso como tratando de evitar que se fuera. El sargento se conmovió e inmediatamente se agachó a acariciarlo y darle besos, para después pedir que se lo llevaran mientras aguantaba las lágrimas.
Luego, el sargento se subió a un vehículo militar y Bei Bei comenzó a ladrar con desesperación, para después salir persiguiendo al auto y recibir una caricia más de quien fuese su compañero de andanzas. El sabueso apoyó las patas en la puerta del vehículo, sin intención de moverse, mientras Zhang lo acariciaba y le movía la mano en señal de despedida.
