La bondad nada tiene que ver con el dinero y este anciano que vive en la calle lo demuestra.
En ocasiones los actos más hermosos vienen de personas inesperadas, aquellas que se vuelven maestros y fuentes de inspiración para hacer lo que es correcto. Un ejemplo de esto son las personas que viven en las calles, muchos piensan que están así por sus malas decisiones y tal vez sea cierto, pero a pesar de sus dificultades, puedes demostrarnos la gran humanidad que habita en ellos.
Un ejemplo de esto lo pudo presenciar Flaviane García, una joven de Serrana, Sao Paulo, que pudo grabar un conmovedor momento entre una persona sin hogar y su perra mascota.
Resulta que a través de Instagram nos mostró al hombre vistiendo al perro con un atuendo infantil que recogió, todo con la finalidad de proteger al perro del frío. Un gesto amable para quien no tiene nada y a pesar de eso, tiene la capacidad de preocuparse por otro ser vivo.
Según contó Flaviane, eso ocurrió frente al salón de belleza al que ella suele asistir. En algunas partes de Brasil existen las “líneas solidarias”, que son espacios donde las personas dejan ropa que ya no usen.
Y fue precisamente una de estas la que el pobre hombre tomó para poder arropar a su perrita, enseñándonos que no se necesitan millones para ser bondadoso. El video llegó a muchas personas, inclusive a una empresa que confecciona ropa para mascotas, quienes donaron una pieza para la compañera de aquel hombre.
“Estaba tan feliz y con un corazón cálido que decidí filmarlo y publicarlo, para mostrar que no todo está perdido y que todavía existen personas de buen corazón”, escribió Flaviane sobre aquel afortunado momento.
Es probable que aquel personaje tenga muchas más preocupaciones en el día, por ejemplo, qué comerá ese y los próximos días, sin embargo, se toma su tiempo para cuidar a su mejor amiga. Suponemos que lo mismo es con la alimentación, probablemente también comparta lo que tiene de comida con ese compañero fiel.
Al parecer, en algunas zonas de Brasil el clima está muy frío, las personas se han preocupado por quienes viven en la calle y han donado ropas. Inclusive aquel amable hombre que cuida de su perra, está bien abrigado, por lo que vivir en las calles no debe ser fácil ahorita.