El oficial Batiz acogió a la pequeña felina en su casa luego de haberla rescatado para que pase la noche, y al día siguiente el oficial Crosby se encargó de llevarla a un refugio de Charleston (EE.UU) para que la vacunaran, y al ver que no tenía microchip decidió convertirse en su dueño.
El deber de los policías es proteger y servir a la ciudadanía cuando lo necesiten, como son los casos de robos, violencia, personas desaparecidas, entre otros que son de suma urgencia.
Sin embargo esto no quiere decir que los seres humanos son su única prioridad, ya que los animales también lo son. Ellos no están libres de meterse en problemas y situaciones complicadas, sobre todo si son muy pequeños y buscan un lugar donde refugiarse. Afortunadamente hay personas de buen corazón que no dudan en ayudarlos, y en algunos casos darles una oportunidad.

En la ciudad de Charleston, Carolina del Sur (Estados Unidos) el oficial Batiz del departamento de policía local recibió un llamada que le avisó sobre un caso que debía ser atendido con urgencia, se trataba de una gatita que había quedado atrapada dentro del motor de un jeep, como informaron en Facebook.
Como era tan pequeña y flexible, seguramente no tardó en entrar. Los felinos suelen elegir sitios seguros y calientes para abrigarse, pero este era muy peligroso para ella. Por lo mismo es importante revisar antes de encender el vehículo como también los neumáticos, otro de sus lugares favoritos.

Tan rápido como entró, el oficial no tardó en comenzar la misión de rescate para poner a salvo a la criatura. En cuanto lo logró, la llevó consigo en el auto policial para que durmiera en su casa esa noche, ya que al parecer no tenía dueño.
«Después de asegurar a la gatita y no encontrar un dueño, la puso en su patrulla de policía y se ofreció a llevarla a casa por la noche», contó el departamento en Facebook.

Un día después el oficial Crosby, un colega suyo, se encargó de llevar a la gatita a un refugio para que cuidaran de ella en caso de no tener un dueño. Los empleados revisaron si tenía microchip, y al no encontrarlo, Cosby decidió convertirse en su nuevo dueño y le puso el nombre de Clover.
«Al día siguiente, otro oficial del equipo 2, el oficial Crosby, llevó a la gatita al refugio de animales, revisó si tenía un microchip, recibió todas sus vacunas y ¡adoptó a la gatita!«, detalló el departamento en la publicación. «¡Estamos felices de que haya podido encontrar un buen hogar!«, agregó.