También podrían causarte graves quemaduras en la piel.
Durante semanas, Robert Emma intentó descifrar qué tipo de planta era la que comenzaba a crecer junto a su casa. Era de color blanco, con espinas, hojas dentadas de casi dos metros y lucían más altas que una persona. Nada que estuviese en el registro de este jardinero aficionado.
“Cuando se ve esto, pensarías ‘no voy a tocar eso’”, dijo el hombre de Virgnia. Y honestamente, nadie debería.
Es que este extraño ejemplar, se trataba de un “perejil gigante”, una planta tóxica con savia que puede causar quemaduras severas e incluso ceguera. Debe ser removida con un equipo de protección y requiere de un permiso especial para moverla entre los estados del país.
Mark Sutphin, un agente de extensión agrícola de Virginia Tech, dijo que arrebató un trozo de la planta del patio de Robert mientras llevaba un traje de seguridad y gafas, luego lo trajo de vuelta al laboratorio para su identificación.
Ahora las autoridades se están asegurando de que la gente no la busque, ni acceda a esta planta. Sumado a los eternos esfuerzos por erradicarla de Nueva York y otros lugares del noreste de Estados Unidos.
Esta planta es originaria del sudoeste de Asia y apareció por primera vez en Norteamérica en 1917, cuando fue introducida por motivos ornamentales.
“Las reacciones cutáneas varían, pero puede producirse fitofotodermatitis, lo que significa que la savia hace que la piel sea tan sensible a la luz solar que pueden producirse quemaduras por exposición normal al sol“, afirma un comunicado del condado de la isla de Wight, cerca de Norfolk.
“Los síntomas incluyen ampollas dolorosas, que se pigmentan de manera oscura y pueden causar cicatrices. Su piel puede permanecer sensible a la luz solar durante muchos años después de la exposición también. Y, si la savia entra en tus ojos, existe la posibilidad de ceguera “, aseguran.
Si por accidente te ves expuesto a esta planta, los expertos sugieren lavar el área con agua y jabón y mantenerse alejado del sol. Y claro, evitar las cabinas de luz o bronceado por los siguientes días.